Con el objetivo de reducir emisiones, ahorrar costos y avanzar en sus objetivos de sostenibilidad, Scania ha convertido a la fundición de chatarra en un elemento fundamental de su proceso de circularidad.

Scania explicó que, en las operaciones de fundición, se está llevando a cabo una transformación silenciosa que demuestra que la sostenibilidad y la rentabilidad pueden ir de la mano. El objetivo es reducir el uso de materiales vírgenes sin comprometer la calidad ni la producción.

«Este proyecto piloto está replanteando cómo fabricamos bloques de motor y culatas, convirtiendo la chatarra en recursos valiosos», señaló la armadora sueca.

Tradicionalmente, la fundición dependía del arrabio, un material virgen extraído en Brasil y transportado a través de los océanos. No solo era caro, sino que su huella de carbono, desde la extracción hasta el transporte, no se alineaba con los objetivos climáticos de Scania.

«Hace tres años, usábamos aproximadamente un 30% de arrabio», afirmó Christopher Armstrong, Ingeniero de Procesos de la Fundición de Scania. «El año pasado lo redujimos al 10%. Y este año, aspiramos a tan solo el 5%».

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Ingeniería profunda

De acuerdo con Scania, Christopher Armstrong tiene la tarea de obtener chatarra metálica con la composición química y las propiedades físicas adecuadas para cumplir con los rigurosos estándares de las piezas de motor.

«Comprar chatarra no es difícil», explica Thomas Lindstedt, Director de Producción. «Pero comprar chatarra con la composición química exacta que necesitamos puede ser complicado. Algunos oligoelementos pueden destruir las propiedades del hierro».

Thomas destaca la complejidad: «Lo que Christopher ha hecho es ingeniería profunda. Encontró el equilibrio perfecto, combinando materiales de forma que se reducen las emisiones y los costos, sin comprometer la calidad».

«Aquí, comprobamos la calidad de cada pieza fundida extrayendo una pequeña muestra. También comenzamos a reutilizar chatarra de cobre de nuestra planta de Oskarshamn, piezas que ya no pueden utilizar en su proceso de soldadura. En lugar de vender esa chatarra, la fundimos y la transformamos en nuevas piezas de motor», afirma Christopher. ¿El resultado? Reducción de residuos, costos de transporte y emisiones, todo dentro de Scania.

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Beneficios

Scania destacó que, entre los beneficios de este proceso de fundición, se encuentran:

  • Emisiones de CO2. Reducidas al sustituir el arrabio virgen por chatarra de origen local.
  • Ahorro de costos. Evitar el arrabio reduce los costos de compra y elimina el margen de beneficio del concesionario en la reventa de chatarra.
  • Ventajas en la circularidad. Ahora, más materiales permanecen en el ecosistema de Scania, lo que contribuye directamente a sus objetivos de sostenibilidad.

Los resultados hablan por sí solos: Solo en 2024, la fundición redujo el costo por pieza fundida en un 7%. Para ponerlo en perspectiva, una sola fundición es como hornear una gran cantidad de «masa» metálica: una carga completa del horno produce suficiente material para 72 culatas. Con miles de fundiciones procesadas al año, estos ahorros se acumulan.

Este cambio también contribuyó a una reducción de aproximadamente 8,000 toneladas de CO2e, lo que equivale aproximadamente a retirar de circulación 1,700 automóviles durante un año.

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