El informe anual de robo de carga a nivel global de BSI y TT Club, colocó a México por segundo año consecutivo como el tercer país con mayor incidencia, donde tres tendencias marcaron particularmente al sector en 2021: incidentes relacionados con información privilegiada, fraudes y riesgos de seguridad en el país.

Cabe mencionar que el análisis elaborado por el proveedor global de inteligencia de la cadena de suministro y la aseguradora de transporte y logística internacional, ubicó a México como el tercer país con más casos en 2021, solo por debajo de Brasil y la India, que nuevamente lideran la lista. 

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Enemigo en casa

BSI y TT Club destacan que los robos relacionados con información privilegiada en Norteamérica van en ascenso; sin embargo, México y Estados Unidos superan significativamente a Canadá. 

Aproximadamente el 5.2% de los incidentes registrados involucraron participación interna en las empresas. Si bien esto es relativamente bajo, la tendencia va en aumento desde 2019 y 2020, pues este fenómeno se disparó un 48 por ciento, al pasar del 1.7% en 2020 al 5.2% el año pasado.

El informe reconoce que esta incidencia es baja comparado con países de Europa y Asia donde concentra el 20 y 13 por ciento, respectivamente; siendo un fenómeno que se presenta principalmente entre personal de almacenes y de instalaciones de producción.

Para prevenir estos riesgos, BSI y TT Club recomiendan auditar las empresas de almacenamiento para verificaciones estrictas de antecedentes de colaboradores y tomar medidas básicas de seguridad, como la vigilancia por sistemas de videovigilancia en instalaciones, así como la colocación de dispositivos GPS en los vehículos.

Agregan que la capacitación en concientización sobre amenazas y la importancia de informar incidentes de seguridad ayuda a mitigar la amenaza del robo interno.

Fraude a la vista

Un fenómeno no exclusivo en México y que el informe destaca es que los delincuentes han adoptado nuevas tácticas para atacar el entorno cambiante del transporte de mercancías. La creciente dependencia de la tecnología ha representado una oportunidad para que las empresas aumenten su eficiencia, pero también abrió la puerta para que los delincuentes se aprovechen de las mayores vulnerabilidades.

Algunas tácticas nuevas identificadas el año pasado incluyen el aumento de la de aplicaciones y sitios web para ofrecer servicios de transporte de carga que, al requerir menos investigación que otros métodos, los delincuentes aprovechan para presentarse más fácilmente como transportistas u operadores legítimos. 

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A lo largo de 2021, los empresas en Europa comenzaron a reportar un aumento de recolecciones ficticias y transportistas fraudulentos, lo que destaca la expansión de este riesgo en todo el mundo.

De acuerdo con BSI y TT Club, las principales ubicaciones de robo fraudulento a nivel mundial incluyen Brasil, Rusia, Italia y México, donde los delincuentes se presentan falsamente como transportistas legítimos, la mayoría de las veces para robar alimentos, bebidas y productos de tipo agrícola; sin embargo, los datos también revelan un número creciente de hurtos de metales y materiales de construcción.

Estos robos generalmente involucran a los transportistas que recogen las mercancías sin despertar sospechas y, a menudo, el delito ni siquiera se descubre hasta que llega el transportista legítimo para recoger las mercancías. A menudo, esto ocurre cuando las empresas contratan empresas nuevas o desconocidas y no realizan controles previos adecuados.

Las empresas señalan que este modus operandi puede variar en sofisticación, y los ladrones llegan tan lejos como para acceder ilegalmente a sistemas informáticos para robar identidades y presentarse de manera fraudulenta.

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Los riesgos locales

El informe subraya que la evaluación de los riesgos de seguridad debe ser un componente clave de cualquier empresa. Esto no debe detenerse únicamente en el nivel de delincuencia que afecta a las cadenas de suministro, sino también tratar de determinar los detalles más finos de los riesgos inherentes a un país determinado.

En México, por ejemplo, los secuestros de camiones representan la mayoría de los incidentes de robo en el país y, por lo tanto, representan el riesgo más importante de robo de carga, lo que significa que las empresas deben poner un mayor énfasis en proteger los envíos en tránsito.

Asimismo destaca que la actividad de los cárteles en México, la cual califica como sin paralelo en el mundo, requiere evaluaciones de riesgo continuas. Por ejemplo, con las restricciones en la frontera con Estados Unidos debido a la pandemia de COVID-19, los cárteles buscaron formas para infiltrarse en cadenas de suministro consideradas esenciales para reemplazar esta ruta de transporte restringida. 

“Esto muestra cómo no solo una evaluación inicial de riesgos es clave para una cadena de suministro resiliente, sino también el seguimiento para mantenerse actualizado sobre los riesgos cambiantes”, concluye el informe.

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