La venta de autos nuevos en México cayó 22.6% anual enero, afectada por el incremento de contagios por COVID-19, las restricciones a la movilidad y la crisis económica. 

En enero pasado, las distribuidoras colocaron 81,203 vehículos ligeros nuevos en el mercado, se trata de 23,649 unidades menos que un año atrás, informó el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi). 

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Este resultado se trata de la cifra más baja para un enero desde 2012, cuando la venta de autos fue de 75,297 unidades. 

En su variación mensual, el retroceso es de 22.8% respecto a los 105,135 vehículos comercializados en diciembre pasado, de acuerdo con datos del Inegi. 

Al respecto, Guillermo Rosales Zarate, director general de la Asociación Mexicana de Distribuidores de Automotores (AMDA), expuso que incremento de contagios, muertes y temor causado por la pandemia COVID-19 es el principal factor que frena la venta de autos en México. 

A causa del deterioro de la situación sanitaria, las distribuidoras de vehículos permanecieron cerradas en Puebla hasta el 24 de enero, en la Ciudad de México hasta el día 25, en el Estado de México y Morelos durante todo el mes, explicó. 

Detalló que estas entidades representan 30% de las ventas nacionales y las restricciones a la comercialización de vehículos en esta zona impactaron significativamente el resultado total del mes. 

A esto se suma, dijo, una disminución en el suministro de vehículos a causa de la insuficiencia en las plantas de manufactura de semiconductores electrónicos. 

La caída del 22.55% en la venta de vehículos ligeros nuevos en enero profundiza la crisis del sector, interrumpe la tendencia de lenta recuperación y modificará a la baja la expectativa inicial de crecimiento de 11.2% esperado para el año”.

Guillermo Rosales, director general de la AMDA. 

De fondo, expuso Rosales Zárate, la venta de autos se mantiene afectada por el deterioro en la confianza de los consumidores y del entorno económico, lo que provoca que clientes potenciales posterguen su decisión de compra. 

Un factor adicional que está impactando a nivel global la manufactura automotriz y disminuyendo la entrega de vehículos es la crisis en la proveeduría de vehículos a los distribuidores, añadió.