Algunas fracciones arancelarias incluidas en la propuesta del Gobierno federal para modificar la Ley de los Impuestos Generales de Importación y de Exportación (LIGIE) afectarán la producción automotriz en México, por lo que líderes de este sector mantienen un diálogo con la Secretaría de Economía (SE) para que esta medida no se convierta en una disrupción en las cadenas de suministro.

«Desde la industria estamos haciendo una revisión fracción por fracción de los aranceles propuestos, llevamos ya varias reuniones con la Secretaría de Economía, ha habido diálogo y amplia disposición», dijo a TyT Gabriel Padilla, director general de la Industria Nacional de Autopartes (INA), al finalizar el conversatorio «Acelerando la industria automotriz: retos y oportunidades», organizado por la plataforma financiera MUNDI.

Te puede interesar: Distribuidores de refacciones llaman a reevaluar propuesta de aranceles a autopartes

Padilla agregó que en esta revisión participan la INA, la Asociación Mexicana de la Industria Automotriz (AMIA) y la Asociación Nacional de Productores de Autobuses, Camiones y Tractocamiones (ANPACT), ya que varios productos automotrices a los que se les impondrá aranceles, son de gran relevancia en el sector de vehículos ligeros y pesados.

La iniciativa del Gobierno federal, incluida en el Paquete Económico 2026, contempla imponer gravámenes a países con los que México no tiene un tratado comercial, como China. En total son 1,463 fracciones arancelarias en 17 sectores estratégicos, entre ellos maquillaje, juguetes, muebles, aluminio, electrodomésticos, autopartes, autos ligeros y camiones.

Industria pide apoyo en importaciones

El director de la INA detalló que la sugerencia de las asociaciones del sector automotriz para que estos aranceles no impacten la producción nacional va en dos sentidos: uno es que las autopartes que no se puedan sustituir con manufactura local se puedan importan a través de programas como IMMEX, y dos, apoyos para las empresas mexicanas que en el mediano y largo plazo sustituirán las importaciones.

«Lo que estamos buscando es que, de prevalecer los aranceles de la iniciativa, le permitan a las empresas que estas fracciones estén incluidas en programas de exportación como IMMEX y la regla octava del PROSEC para que no afecte la producción nacional», planteó Gabriel Padilla.

Actualmente, la Secretaría de Economía cuenta con el Programa de Promoción Sectorial (PROSEC) y el Programa de la Industria Manufacturera, Maquiladora y de Servicios de Exportación (IMMEX), los cuales permiten a las empresas importar mercancías a México de forma temporal, libre de impuestos y cuotas compensatorias, siempre que estos bienes sean esenciales para sus procesos productivos.

El planteamiento de la industria automotriz es que los productos incluidos en la propuesta arancelaria del Gobierno federal que no puedan ser sustituidos por la manufactura local, se incorporen a estos dos programas.

«Tenemos que hacer la revisión de las fracciones para que no haya una disrupción de las cadenas de suministro, sobre todo no queremos afectar la competitividad lograda por el sector automotriz mexicano en más de 30 años», aseguró Padilla.

Impulso a la manufactura nacional

Sobre el apoyo a la manufactura nacional para sustituir las importaciones, uno de los principales objetivos de la Ley de los Impuestos Generales de Importación y de Exportación (LIGIE) y el Plan México, el director de la INA precisó que la industria también está impulsando apoyos a las pequeñas y medianas empresas del sector.

«Lo que queremos es que haya apoyos para las empresas que puedan sustituir las importaciones», indicó.

La INA cuenta con el Programa de Desarrollo de Proveedores, el cual busca fortalecer la integración de las PyMEs mexicanas en la cadena de suministro del sector automotriz, contribuyendo a la competitividad de las cadenas de suministro de autopartes que hoy alcanzan un valor de producción de 121.7 mil millones de dólares.

Representantes de la industria automotriz hablan sobre los aranceles propuestos por el Gobierno. Foto: Guadalupe Fuentes, TyT.

Este programa es respaldado por la Corporación Financiera Internacional (IFC, por sus siglas en inglés), miembro del Grupo Banco Mundial.

La propuesta arancelaria del Gobierno federal contempla que las autopartes de países con los que México no tiene un tratado pagarán un gravamen del 10 al 50%, desde un 0 al 35% actual. En este sector se incluyen 141 fracciones arancelarias para productos como reflectores de borosilicato, cerraduras, limpiaparabrisas, asientos de autos, entre otros. 

En el caso de los autos ligeros, incluyendo los eléctricos e híbridos, tendrán un gravamen del 50%, más del doble del que actualmente pagan.

Te invitamos a escuchar el nuevo episodio de nuestro podcast Ruta TyT: