Con el objetivo de mostrar integralmente el proceso de producción que los convierte en vehículos “Nacidos para Servir” así como recompensar su lealtad por la insignia del bulldog, un nutrido grupo de transportistas mexicanos recibieron la invitación para ser parte de la «Mack Experience VIP».
El punto de partida de esta experiencia fue un recorrido por la planta de fabricación de motores y transmisiones en Hagerstown, Maryland, lugar donde se producen los motores MP8 y transmisiones T318L, configuración común en nuestro país. Con un enfoque de mejora continua esta factoría logra gran eficiencia y calidad en su manufactura, prueba de ello es que durante 2013 se produjeran 42,125 motores y 23,878 transmisiones. Esta planta incorpora alta tecnología y automatización en la cual cientos de robots van trasladando los motores entre diferentes celdas de manufactura, mientras que los técnicos y brazos automatizados con todo cuidado y precisión incorporan componentes o llevan a cabo procesos de verificación para asegurar la calidad de todo lo producido.
La segunda escala en la «Mack Experience VIP», fue la planta de ensamble en Macungie, Pensilvania. Los transportistas invitados pudieron apreciar de cerca las líneas de ensamble de donde nace prácticamente la totalidad de los camiones y tractocamiones de esta marca norteamericana. Mack Trucks se comercializa en poco más de 45 países, incluyendo el mercado mexicano. Durante la visita a esta factoría los asistentes a esta gran experiencia tuvieron la oportunidad de realizar un recorrido muy cercano por las diferentes partes del proceso de manufactura. Desde la pintura de las cabinas, pasando por el armado de tren motriz, el montaje de chasis con habitáculo y hasta ver el producto terminado. Es evidente el apego que existe hacia la marca por parte de cada uno de sus colaboradores, esto definitivamente impregna a cada uno de los tractocamiones Mack una identidad única.
El tercer destino de esta experiencia, se llevó a cabo en la pista de pruebas localizada en el Customer Center de la icónica marca norteamericana en Allentown, Pensilvania. Este fue uno de los momentos más esperados por todos los asistentes quienes manejaron tres unidades: dos Vision y un Granite. Los primeros con transmisión mecánica automatizada mDrive y el último con automática Allison, todos con motor MP8. Como parte de este Customer Center también se encuentra el Mack Heritage Center donde los asistentes pudieron adentrarse a los 114 años de historia que respaldan a esta marca.
Finalmente, la «Mack Experience VIP» tuvo como sede de su clausura la ciudad de Nueva York, misma que fue testigo del nacimiento en el año 1900 del vehículo «Manhattan» fabricado por los hermanos Mack. Contaba con 24 caballos de fuerza, motor de cuatro cilindros y alcanzaba una velocidad de 12 millas por hora. Este vehículo fue diseñado para el traslado de personas, tenía una capacidad de 13 pasajeros y operó durante ocho años en Brooklyn.
Durante el cierre de este evento, con una espectacular vista hacia Manhattan, Matthew Walsh director de esta icónica marca norteamericana señalo: «Nos interesa estar muy de cerca de nuestros clientes actuales y potenciales. Conocer sus necesidades, expectativas y requerimientos es nuestro principal objetivo, sólo así podemos ofrecerles las soluciones óptimas para su negocio».
