El futuro de Grupo GAL está en la incursión del que considera el mercado más importante del país: la Ciudad de México y su zona conurbada. La empresa transportista ya tiene centros de operaciones en Mérida, Yucatán; Celaya, Guanajuato, y en Lagos de Moreno, Jalisco.
Con estas bases atiende a numerosos clientes –que a su vez les han ayudado a conquistar nuevos socios de negocio–, y con las que ha logrado diversificar sus mercados y continuar con su vocación de servicios logísticos.
Es claramente una fortaleza nuestra. Estamos preparados y con la experiencia de haber madurado las dos bases fuera de Yucatán. Ya rompimos el paradigma, y lo ha hecho bien el equipo de colaboradores con el que contamos”,
Alejandro Vargas, Director General de Grupo GAL.
La empresa planea contar con un espacio en el Estado de México a partir del segundo semestre de 2021. Utilizará como punta de lanza el transporte de mercancías e irá creciendo conforme la demanda del mercado para posteriormente instalar un almacén refrigerado.
Para esta compañía, la crisis derivada del COVID-19 es un catalizador para incursionar en el centro del país, cuya base también servirá como un punto de conexión hacia otras partes del país y para que sus vehículos de carga cuenten con un espacio de seguridad.
“Tenemos el espacio suficiente para empezar. La idea es seguir haciendo esa combinación exitosa de almacenaje y transporte, porque le damos una solución integral al cliente: transporte desde sus plantas y sus centros de producción, hasta almacén y entregas de última milla”, detalla el directivo en entrevista.
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Grupo GAL se muestra como un proveedor logístico maduro, ordenado y fiel a sus principios de calidad en el servicio e innovación. Este año, marcado por el golpe económico y sanitario del SARS-CoV-2, la empresa también trabaja en la ampliación de 1,500 metros cuadrados de uno de sus almacenes en Mérida.
“Hemos observado que el mercado está siendo más dinámico: ya no es tener los grandes inventarios, sino se enfoca en cruces de andén, un lugar donde transiten los grandes volúmenes, desconsoliden y se vayan al reparto conocido como última milla. Es donde enfocamos el crecimiento: en el área de preparación y recepción del producto”, añade Alejandro Vargas.
Grupo GAL crecerá la capacidad de este almacén en aproximadamente 30%, ampliación que ya tenían definida debido al alto porcentaje de utilización en el área de preparación y recepción de producto. “Si no lo hacíamos, íbamos a debilitar nuestro crecimiento”, reconoce.
Adicional a esta ampliación, Grupo Gal está invirtiendo en paneles solares que alimenten a las oficinas y al mismo tiempo contribuyan al cuidado del medio ambiente.
Grupo GAL: fortalecerse frente a la crisis
Alejandro Vargas advierte que el impacto del nuevo Coronavirus es histórico, por lo que se prepara para enfrentarlo, pues considera que las repercusiones no serán solo de corto plazo.
Digamos que estamos tratando de avanzar y prepararnos mejor, porque pueden venir tiempos más difíciles. Las empresas mejor preparadas van a ser las que queden después de esta crisis. Y estoy seguro de que Grupo GAL será una de éstas”, comparte Alejandro Vargas.
La empresa trabaja en robustecer su área de capacitación y recursos humanos, y está en la última fase de implementación de un software TMS (Transport Management System), que se complementará con el software de gestión ERP especializado en transporte.
Se trata de tecnología para la precisión, optimización y trazabilidad en la operación del transporte de mercancías y la logística.
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