Considerada por SensiGuard la vía con mayor incidencia de robo a transporte de carga –concentrando el 25% de los 10,037 incidentes reportados durante el primer semestre del año–, esta firma destaca los puntos en los que se es más vulnerable ante la delincuencia.

En primer lugar se ubica el tramo Amozoc – Esperanza, en Puebla, que en sus aproximadamente 100 kilómetros de camino se han reportado el 59% de los casos ocurridos en esta autopista.

En esta zona, destaca la incidencia en los municipios: Tecamachalco, Acatzingo, Amozoc, Quecholac y Tepaca.

El segundo tramo con mayor incidencia es el San Martín Texmelucan – Amozoc, ubicado geográficamente junto al primer lugar en esta lista negra. Datos de SensiGuard revelan que en este sitio ocurrieron el 19% de los incidentes contabilizados en esta carretera.

Le sigue el tramo Esperanza – Fortín, camino conformado por territorio poblano y veracruzano, el cual concentra el 10% de los robos reportados en esta carretera federal.

El resto de la incidencia está dividida en los tramos: Ciudad de México – San Marcos, con 5% de los casos; San Marcos – San Martín Texmelucan, con el 3 por ciento; Fortín – Tinaja y Tinaja – Veracruz con 2% cada uno.

En su informe, SensiGuard señala que no es una sorpresa que la mayoría de los robos al autotransporte de carga se registren en Puebla, una entidad en la que las condiciones geográficas y sociales facilitan esta actividad ilícita.

Asimismo, recalca que en esta zona se han detectado muchos grupos dedicados a este delito con extensas redes de distribución, fuertemente armados y modus operandi violentos.

Los criminales que operan a lo largo de la México – Veracruz, continua el informe, están altamente especializados en robo de carga, con suficientes hombres y capacidad logística para interceptar a las unidades. Además, conocen las rutas de escape y utilizan la tecnología para esconder la mercancía robada para luego distribuirla en el mercado informal.