A dos meses de iniciadas las obras de mantenimiento en el puente Mariano García Sela, mejor conocido como Puente de Metlac, usuarios de la autopista Ciudad Mendoza-Córdoba señalan demoras de hasta tres horas en el tránsito vehicular, lo que se ha convertido en un riesgo, dijeron, por la inseguridad que se vive en las carreteras de México y los costos adicionales que esto genera . 

“Nosotros nos dedicamos a mover el país, y para la gente que va de viaje también es un riesgo; ya tenemos robos. La semana pasada asaltaron a un autobús de ADO en la fila”, contó José Carlos Gilibert Peña, Director General de Transportes Especializados Orizabeños (TEOSA). 

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Para el transportista, los «cuellos de botella» que se hacen en una de las autopistas más transitadas de México le hacen pensar que un día de estos podría ser víctima de la delincuencia organizada, como ocurre en otras carreteras del país. 

“Me tocó hace ocho días en el Arco Norte estar dos horas por un accidente y vi cómo van asaltando en la fila de vehículos, porque te asaltan ya donde quiera que hay cola. Se dice que hay un grupo de WhatsApp donde se ponen de acuerdo (los delincuentes) para asaltar si ven unidades paradas; y yendo en la Orizaba-Córdoba ¿para dónde corres?”, plantea el directivo. 

Puente de Metlac 

Desde el pasado 19 de septiembre, Caminos y Puentes Federales (Capufe) informó que arrancaría con las obras de rehabilitación del puente ubicado en el kilómetro 284 de la autopista Ciudad Mendoza-Córdoba, por lo que habría, primero, cierres a la circulación en dirección a Orizaba, y después, en sentido a Córdoba. 

Capufe destacó que se habilitó un carril de contraflujo y aseguró que las obras de mantenimiento tendrían una duración de cuatro meses por sentido, aunque para los usuarios, esperar a que concluyan estos trabajos es preocupante. 

“No hay seguridad, no hay vigilancia, no hay nada, entonces, ¿para dónde corres? En quincena, a las 12 del día hay una fila de más de cinco kilómetros, ha habido días que desde la caseta del puente, la cola llega hasta Orizaba, y eso quiere decir casi la mitad del camino”.

José Carlos Gilibert Peña, Director General de TEOSA.

Al respecto, transportistas en Córdoba también destacaron la falta de seguridad en las largas filas que se forman en el Puente de Metlac, por lo que lanzaron un  llamado a las autoridades federales para agilizar las obras y pidieron más seguridad, además de señales e iluminación para que los conductores manejen con precaución en la zona. 

Más que horas perdidas 

Al miedo a ser asaltados se suman los costos de estar horas detenidos, el consumo de combustible, el cansancio de los operadores y la negociación constante con sus clientes. 

“Es difícil, aunque, desafortunadamente nuestros clientes se han tenido que ‘acostumbrar’, pero nosotros no, porque independientemente que se genere un gasto, pues hay un desgaste de la unidad, del motor, y si está prendido en baja, pues es más. Luego el operador metiendo y sacando el clutch, y también ellos cansan y es peligroso”, agrega el transportista. 

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El Director de TEOSA es sólo uno de los cientos de transportistas afectados que viajan a diario por la Orizaba-Córdoba, pues algunos usuarios de la vialidad han reportado en redes sociales que debido a las obras de rehabilitación en el Puente de Metlac han demorado hasta tres horas en un tramo que regularmente tardan 15 minutos en promedio en transitar.

Para José Carlos, lidiar con los inconvenientes en el tramo Orizaba-Córdoba es un reto, pero también sabe que las obras de mantenimiento son necesarias, aunque opina que podrían realizarse de una manera más estratégica. 

“Estoy de acuerdo que al Puente de Metlac le toca mantenimiento, pero, ¿por qué seguir siendo un país hecho ‘al ahí se va’?, en China, en Europa se construye un puente o un desnivel en 24 horas, trabajan día y noche, aquí no, aquí lo hacen justamente cuando están pasando todos, ni una ambulancia puede circular”, destacó.

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