De forma paulatina, las mujeres se abren paso en la industria del autotransporte, históricamente dominada por los hombres.

Entre 2016 y 2018, la presencia de las mujeres en el transporte de carga pasó de 8.96% a 10.6 por ciento, de acuerdo con cifras preliminares del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).

En 2018, los empleos dependientes y no dependientes de la razón social de las empresas de autotransportes totalizaron 221,188 puestos.

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De esos empleos, 23,530 eran ocupados por mujeres, es decir 10.6 por ciento, según información anualizada de la Encuesta Mensual de Servicios Privados No Financieros (EMS). 

Dos años atrás el sector ocupó a 232,647 personas, y 8.96% de ellas eran mujeres, reveló la Encuesta Anual de Transportes (EAT), también realizada por el Inegi.

Información de Cuentas Nacionales, del Inegi, refiere que el empleo otorgado por el autotransporte de carga en México en 2018 fue de un millón 98 mil 668 personas.

Oportunidades para las mujeres en la frontera

Al respecto, Israel Delgado Vallejo, delegado de la Cámara Nacional de Autotransporte de Carga (Canacar) en Tijuana, Tecate y Ensenada, sostuvo que la industria representa una oportunidad para el desarrollo profesional de las mujeres, quienes cada vez se interesa más en participar.

Es una excelente oportunidad en una industria que ha sido típicamente de hombres y que hora vemos que la mujer está muy activa e interesada en participar y que además representa una oportunidad de ingresos mayores respecto a otras actividades”, dijo.

En entrevista para TyT, el Delgado de Canacar expuso que entre sus prioridades para este año están la formación de un Centro de Capacitación y Desarrollo para profesionalizar a operadores e impulsar la inclusión de las mujeres.

Así, la mayor presencia de las mexicanas en el autotransporte de carga estaría acompañada de una mayor profesionalización.

Detalló que actualmente hay nueve mujeres manejando camiones de carga entre Tijuana y San Diego, quienes perciben salarios tres veces superiores a los de quienes solo mueven mercancías en territorio nacional.

Subrayó que, la frontera de Tijuana tiene ventajas para la inclusión femenina, pues las características geográficas entre esa ciudad mexicana y San Diego les permite trabajar de forma segura, libres de la violencia que se presenta en otras carreteras del país.

“Acá (Baja California) no tenemos esa problemática, toda vez que las características geográficas entre Tijuana y San Diego son muy seguras comparadas con el resto del país y permiten a las mujeres desarrollarse como operadora de camiones de carga”, sostuvo.

Así, Israel Delgado Vallejo prevé que las mujeres se sumarán cada vez más a la operación de camiones de carga, en un contexto de profesionalización, salarios mejor pagados y un déficit de operadores en México y Estados Unidos, estimado en 60,000 y 90,000 vacantes, respectivamente.