A partir de este mes, Mercedes-Benz AG reinició su producción a nivel mundial, después de un periodo de suspensión causado por la pandemia de COVID-19.

Al reanudar con su producción, de manera coordinada, Mercedes- Benz AG continúa con su  oferta eléctrica y de productos, además de atender a su mayor mercado de ventas en China, país donde la compañía experimentó un aumento significativo en la demanda.

“Junto con todo el equipo , me alegra que estemos reiniciando gradualmente nuestra producción de manera coordinada. La flexibilidad de las plantas es uno de nuestros enfoques estratégicos en la producción y eso nos ha ayudado en ese aumento.

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Nuestra prioridad es contener aún más la propagación de la pandemia de COVID-19 y proporcionar un entorno de trabajo seguro para nuestros empleados y proveedores. Estamos produciendo con amplias medidas de seguridad y aumentaremos nuestra producción paso a paso”, indicó Jörg Burzer, miembro del Consejo de Administración de Mercedes-Benz AG.

La situación dentro de la empresa continúa en variación. La gerencia de Daimler monitorea la situación y tomará medidas según sea necesario.

Para México, el corporativo y los puntos de venta, estarán retomando operaciones de acuerdo a lo establecido por el semáforo de actividades y conforme a las recomendaciones del gobierno federal y local.

Mercedes Benz Cars Operations es responsable de la producción de automóviles de pasajeros en más de 30 ubicaciones alrededor del mundo. El reinicio de las plantas de producción en Alemania han ido reanudando operaciones desde mediados de abril. Estas incluyen las plantas en Rumania, que fabrican transmisiones para vehículos de la marca y las plantas de ensamblaje de automóviles de pasajeros.

La producción en China se ha reanudado gradualmente desde el 10 de febrero de este año.

La compañía ha tomado precauciones para prevenir infecciones y ha acordado un conjunto integral de medidas con el Comité General de la empresa. Estos incluyen normas de higiene y limpieza, así como regulaciones para mantener una distancia de al menos 1.5 metros y el uso de máscaras y cubrebocas en la producción.