El próximo 30 de octubre concluye esa vigencia de seis meses del Acuerdo que modifica el Transitorio Segundo de la Norma Oficial Mexicana NOM-012-SCT-2-2008, sobre el peso y dimensiones máximas con los que pueden circular los vehículos de autotransporte que transitan en las vías generales de comunicación de jurisdicción federal, publicada el 1 de abril del 2008.

En conferencia de prensa, Javier Altamirano, Presidente de la ANTP, explicó que -como lo señalaron en un desplegado que firmaron con otros organismos que están afectados por estas medidas-, el impacto económico que calculan es de 28 mil millones de pesos anuales por el incremento del costo de los fletes, lo que se traducirá en inflación.

Este cálculo es resultado de un estudio del Consejo Mexicano de Hombres de Negocios, aunque no reúne a todas las empresas del sector, aclaró. ANTP-confe

Leonardo Gómez, Director General de la ANTP, comentó que hasta el momento existen más de 150 juicios de nulidad y amparos contra estas medidas de SCT que están en proceso y que podría aumentar el número de éstos si se extiende la vigencia. Destacó que hay varias inconsistencias en la información de la Secretaría y que la Cofemer debe hacer un análisis exhaustivo de la misma.

Altamirano comentó que de continuar con la reducción de peso en los fulles en algún momento sería inevitable que las flotas de transporte tengan que adquirir más vehículos y no todos podrían ser nuevos, sino usados, lo que envejecería aún más el parque vehicular del país, cuya edad promedio actual es de 17 años. 

Lamentó que los accidentes continúen ocurriendo a lo largo del país, en muchas otras configuraciones de vehículos de carga y de pasajeros, incluso vacíos, y que hasta el momento no se haya tomado una medida por parte de las autoridades para detener esta tendencia y atender la causa número uno de los siniestros que en 80% son causados por errores humanos y, en segundo lugar, por malas condiciones mecánicas de algunas de las unidades.