Los vehículos pesados constituyen la mayor fuente de emisiones de carbono del sector del transporte en prácticamente todas las economías del mundo. El uso de combustible en estos vehículos, y por lo tanto sus emisiones de carbono, se pueden reducir gracias a los nuevos avances tecnológicos y los cambios en las políticas y regulaciones. Sin duda, Estados Unidos ha sido una de las naciones más comprometidas con la generación de los cambios que transformen esta industria. Precisamente en este país, los estándares de eficiencia que regirán a los vehículos en el 2020 –incluidos, tractores, remolques y autobuses–, se han trabajado desde el año pasado y este 2015. Las nuevas normas deben tomar en cuenta la supertruck-2_11294713disponibilidad de los avances tecnológicos, así como las tecnologías que se han estado probando en los últimos años.

Para fomentar justamente estos avances, el Departamento de Energía (DOE) de los Estados Unidos creó el Programa SuperTruck, una asociación público-privada de costo compartido que promueve la Investigación  y el Desarrollo de tecnologías (I+D) para mejorar la eficiencia de carga en los tractocamiones Clase 8 de largo recorrido de servicio pesado. Se trata de un programa de $284 millones de dólares que tiene como objetivo ayudar a acelerar el desarrollo de tecnologías de eficiencia avanzadas que no están disponibles actualmente en el mercado. Es la mejor manera de aprovechar los esfuerzos del sector público y privado para desarrollar, demostrar y exhibir tecnologías que pueden aumentar considerablemente la eficiencia de los camiones que mueven la mayor parte de la carga en aquel país, que consumen más combustible, y que generan las más altas emisiones de dióxido de carbono. Tomando como base la tecnología que estaba disponible en el 2010, el Programa estableció que para el 2015 se debía lograr un aumento del 50% en la eficiencia global del tractocamión y un aumento del 20% en la eficiencia del motor, es decir, obtener un 50% de eficiencia térmica de frenado (Brake Thermal Efficiency).
Se conformaron cuatro equipos con empresas reconocidas en la industria del transporte para integrar el Programa: Cummins-Peterbilt, Daimler, Navistar y Volvo. Por supuesto, cada una de ellas, ha tomado un camino diferente para alcanzar el objetivo de crear un SuperTruck y es lo que lo hace más interesante. El International Council on Clean Transportation (ICCT) ha seguido de cerca el trabajo de cada una de estas armadoras y ha generado un informe después de investigar, comparar y evaluar las implicaciones de los trabajos en curso de los cuatro equipos y de la información proporcionada por el DOE.

Los avances en 2013

Estos eran los avances comparativos en 2013, la historia ha cambiado sustancialmente en tan solo dos años.

Estos eran los avances comparativos en 2013, la historia ha cambiado sustancialmente en tan solo dos años. Fuente: ICCT y DOE.

La evaluación concluye que cada uno de los equipos ha alcanzado un progreso sustancial hacia el logro de los objetivos del proyecto. En particular, tres de los cuatro equipos han alcanzado  el objetivo de aumentar la eficiencia de carga del 50 por ciento. Los avances del Programa SuperTruck implican un aumento dramático en la eficiencia de carga en carretera; los resultados del programa, por ejemplo, son equivalentes a un aumento de la economía de combustible del tractocamión de 6 a 7 millas por galón a aproximadamente 9.5 a 10.5 millas por galón. Cuando se evaluaron los progresos de los equipos en lo que respecta al motor a mediados de 2013, todos habían alcanzado el 48% de BTE, y un equipo había superado el objetivo BTE de 50 por ciento. Todos los equipos habían identificado las vías técnicas para alcanzar el objetivo BTE.

SuperTruck Cummins-Peterbilt.

Más allá de los resultados, el análisis del ICCT pone de manifiesto que un esfuerzo sustancial y la inversión de los sectores público y privado contribuyen a la eficiencia económica a largo plazo y a lograr las metas ambientales. El Programa SuperTruck es un claro ejemplo de que una política de Investigación y Desarrollo (I+D) que involucra al sector privado en las actividades, acelera el desarrollo tecnológico. Además, promueve las inversiones en I+D que las empresas individualmente no pueden o no desean llevar a cabo por sí mismas, y fomenta la colaboración entre proveedores de tecnología en un vehículo completo e integrado, algo que de otro modo no ocurriría. El programa aprovecha la inversión pública en investigación aplicada y permite que los conocimientos adquiridos en el laboratorio se conviertan en innovaciones tecnológicas útiles en las flotas vehiculares. Las tecnologías investigadas también puede ayudar a informar a los llamados «creadores de políticas» sobre los futuros objetivos de eficiencia y por ende a la elaboración de los reglamentos para el 2020 y posteriores.

SuperTruck Daimler.

Es probable que en este momento no se dimensionen las implicaciones de un programa de avanzada tecnología y eficiencia tan completo como éste, sobre todo si se considera que la industria de los vehículos pesados es global. Muchas de las tecnologías demostradas en este programa basado en los Estados Unidos se pueden personalizar para otros mercados que están luchando por tener un transporte de carga comercial más eficiente. Es por lo anterior que consideramos sumamente importante dar a conocer los avances de las tecnologías SuperTruck. En los próximos días les compartiremos el detalle de lo que cada uno de estos equipos ha logrado y transformado en realidad.