A un año y medio de haber iniciado sus operaciones en el Estado de México, Kenworth Anáhuac ha sabido entender las necesidades de los transportistas mexiquenses a través de la cercanía con sus clientes, la empatía con sus requerimientos de operación, la puesta en marcha de los programas promovidos por la marca a nivel nacional y mediante una sólida atención postventa.

“Contento, pero no satisfecho”, es el balance que hace de su gestión Víctor del Cid, Director General de la concesionaria mexiquense, la cual, de acuerdo con su testimonio, basa su operación en cinco ejes rectores: clientes, proveedores, empleados, accionistas y el Gobierno, todos clave en el desarrollo de esta empresa y ante quienes debe hablarse de frente y con honestidad.

Explicó que esta distribuidora brinda servicio en las ciudades de Toluca, Atlacomulco y Lerma, donde la mayoría de sus ventas abarca la compra de máximo cinco unidades por cliente, concentrándose en el segmento de los micro transportistas, quienes se caracterizan por hacer una inspección previa de los camiones directamente en las instalaciones de la concesionaria y posteriormente, realizan importantes inversiones para configurar sus vehículos con base en sus requerimientos de operación y, sobre todo, en sus gustos.

En cuanto a los planes previstos para la concesionaria a corto plazo, su director general destacó la apertura de un nuevo centro de servicio y comercialización de unidades en Lerma, el cual se especializará en la venta de camiones seminuevos, todos avalados por la marca para garantizar que se trata de vehículos en regla, libres de cualquier ilícito e incluso, muchos de ellos comercializados en pesos.

Del Cid adelantó que para 2017, cambiarán la ubicación de su sucursal matriz para seguir manteniéndose cerca de sus clientes. Adicionalmente, habló sobre su recientemente inaugurado centro de atención en la avenida López Portillo de la capital mexiquense.