En mayo ingresaron al país 340 tractocamiones, mientras que las armadores de la Asociación Nacional de Productores de Autobuses, Camiones y Tractocamiones (ANPACT) colocaron 250 unidades de este tipo entre sus distribuidores, advirtió su director Ejecutivo, Miguel Elizalde. 

Se importan, en la mayoría de los casos, vehículos con un promedio de 16 años de antigüedad. Y estás importando un problema, un vehículo que no es competitivo, que consume más combustible y contamina más”.

Miguel Elizalde, presidente Ejecutivo de la ANPACT. 

En conferencia de prensa remota, expuso que en los primeros tres meses del año — cuando el SARS CoV-2 aún no tenía mayores efectos en la economía de México— se observó un importante incremento en la importación de vehículos de carga usados, este fue de 29.3% anual. 

Con la propagación de nuevo Coronavirus COVID-19 en el país, el mercado de los pesados usados se desaceleró, pero no a igual ritmo que el caso de la industria instalada en México.

En mayo ingresaron al país 340 tractocamiones usados, cifra superior a los 250 vehículos quinta rueda fabricados en México, colocados entre los distribuidores. 

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Entre enero y mayo, fueron importados 2,631 camiones de carga usados, 6.21% más que los que ingresaron un año antes, cuando la actividad económica del país no tuvo que ser sometida a un coma inducido para contener la propagación de la pandemia. 

En tanto, en los primeros cinco meses de 2020, los integrantes de la ANPACT vendieron 6,090 vehículos pesados entre sus distribuidores, 57.6% menos que un año atrás.

En lo que respecta a los tractocamiones, comercializaron 2,881 unidades entre sus distribuidores, se trata de una fuerte caída de 66.8% respecto a los primeros cinco meses de 2019. 

En este contexto, Miguel Elizalde expuso que el principal reto de la industria de vehículos pesados en el país es el mercado interno, afectado por la caída en las ventas y el incremento de las importaciones de vehículos usados. 

Es el momento de apoyar al autotransporte, ¿cómo? Mantener a la baja la importación de vehículos usados con el control de las irregularidades que pudieran presentarse en la importación de vehículos de desecho de Estados Unidos, impulsar el mercado interno con financiamiento de la banca de desarrollo, con incentivos verdes».

Miguel Elizalde, presidente Ejecutivo de la ANPACT. 

Añadió que habrá que solicitar a las autoridades aduaneras poner especial atención a la importación fraudulenta de vehículos, por subvaluación, «creemos que ese es el mismo punto más crítico», aseveró. 

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Al tomar en cuenta los vehículos de pasaje o buses usados que se importan, principalmente de Estados Unidos, entre enero y mayo ingresaron México 3,469 unidades pesadas, apenas 5% menos respecto a igual lapso de 2019. 

Evaluó que uno de los puntos perfectibles del Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC) es que permite la importación de vehículos usados.

No tenemos en México suficiente regulaciones, es decir, tenemos una asimetría normativa que hace que no podemos exportar usados hacia Estados Unidos y Canadá, pero ellos sí nos pueden mandar toda la basura. 

Miguel Elizalde, presidente Ejecutivo de la ANPACT. 

El líder de la ANPACT insistió en que el autotransporte está en línea de fuego y es clave para construir la nueva normalidad.