La economía de Estados Unidos creció 6.5% en el segundo trimestre del año, en su variación anualizada, por debajo del 8.4% esperado por el consenso, debido a una reducción en el gasto de Gobierno, la inversión, a un menor desempeño de las exportaciones y los inventarios. 

El Producto Interno Bruto (PIB) de Estados Unidos tuvo un moderado repunte en el segundo trimestre, frente al alza anualizada de 6.3% del trimestre inmediato anterior, refieren datos del Buró de Análisis Económico de ese país (BEA, por sus siglas en inglés). 

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La economía del principal socio comercial de México estuvo impulsada por un mayor consumo privado, con un crecimiento de 11.8% trimestral anualizado, gracias al avance en la vacunación de la población –48% de los estadounidenses están totalmente vacunados–, a menores medidas restrictivas y a una mayor movilidad. 

La inversión privada se contrajo 3.5% en su variación anualizada, a mayor ritmo que la contracción de 2.3% vista en el primer trimestre de 2021; en su interior, la inversión fija avanzó apenas 3.0% en el segundo cuarto del año, desde un alza previa de 13 por ciento. 

Otro factor que no abonó al crecimiento de la economía de Estados Unidos fue un mayor avance de sus importaciones que en sus exportaciones, de 7.8% y 6.0 por ciento, respectivamente. 

Así, las exportaciones netas restaron 0.44 puntos porcentuales al PIB de ese país, cumpliendo cuatro trimestres consecutivos de retrocesos. Lo cual refleja, de acuerdo con Grupo Financiero Banorte, un avance del consumo debido a mayores importaciones, en vez de producción local, que sí se contabilizaría en el PIB. 

Una decepción en la economía de Estados Unidos fueron los inventarios, los cuales restaron 1.13 puntos porcentuales al PIB. Debido, de acuerdo con Banorte, a las disrupciones en la cadena de suministros. En este sentido, la industria no está pudiendo hacer frente a la velocidad de recuperación de la demanda.

A tasa trimestral, la economía de Estados Unidos creció 1.6% y a tasa anual el crecimiento fue de 12.2 por ciento, entre abril y junio de 2021.  Así, de acuerdo con el análisis de Banco BASE, el PIB de ese país logró una recuperación completa, ubicándose 0.7% por encima del PIB del último trimestre del 2019, previo a la pandemia.

La actividad económica de Estados Unidos tardó seis trimestres en recuperarse, muy por debajo del periodo de 15 trimestres que le tomó durante la última crisis, del cuarto trimestre de 2007 al tercer trimestre 2011, añadió Banco BASE.

En general, los factores que más abonaron a la recuperación de Estados Unidos fueron los estímulos fiscales, la postura monetaria ampliamente flexible, la reapertura económica y el avance de la campaña de vacunación contra el Covid-19. 

En conclusión, Grupo Financiero Banorte mantuvo su estimado de crecimiento del PIB para 2021 en 6.6 por ciento, favorecido por su reapertura de la economía y mayor movilidad, pese a los mayores riesgos de la variante Delta; al regreso a clases y a un entorno de mayor confianza. 

Banco BASE también mantuvo su pronóstico, de 6.5% anual, y previó que la economía de Estados Unidos continúe su recuperación para lo que resta del año. 

A pesar de que los casos de coronavirus en Estados Unidos han aumentado 209% en el último mes, las muertes han disminuido 5%. Lo anterior es resultado de la eficiente campaña de vacunación por lo que es poco probable que esta nueva ola de contagios se vea reflejada en el crecimiento de la economía estadounidense, detalló.