El impacto económico por las demoras en los cruces fronterizos en la región Cali-Baja, ya sean viajes personales o movimiento de mercancías, son equivalentes a mermas por 3,400 millones de dólares (mdd), más de 1,000 mdd en caídas por ingresos laborales y más de 88,000 empleos perdidos, considerando las economías combinadas de Estados Unidos y México.

Así lo revela el estudio “Impactos de las demoras fronterizas en los puertos de entrada terrestres de California – Baja California”, de la Asociación de Gobiernos de San Diego (SANDAG, por sus siglas en inglés), el Departamento de Transporte de California (Caltrans) y la Comisión de Transporte del Condado Imperial (ICTC).

Este informe también midió el tema ambiental en ambos lados de la frontera, resultando que estas demoras dieron como resultado un promedio de 457 toneladas métricas de dióxido de carbono por día, equivalente al consumo de más de 51,400 galones de combustible.

Asimismo, muestra que sin mejoras adicionales en los puertos de entrada de la región, la pérdida económica estimada continuará creciendo a más de 5,000 mdd y más de 97,000 empleos perdidos para 2025.

Según SANDAG, estas pérdidas podrían mitigarse por completo con mejoras adicionales, incluida la apertura del puerto de entrada de la Otay Mesa East, puerto de conexión entre Tijuana y San Diego, y que estaría listo en 2023, reduciendo los tiempos de cruce del autotransporte de carga de un promedio de 2.5 horas a 20 minutos.

“Reducir el tiempo de espera en la frontera y las emisiones relacionadas es crucial para la prosperidad de las comunidades en ambos lados de la frontera”, dijo Serge Dedina, Presidente del Comité de Fronteras de SANDAG y alcalde de Imperial Beach, California. 

“Este informe demuestra el tremendo impacto positivo que un nuevo cruce fronterizo podría tener en la economía y el medio ambiente entrelazados de nuestra región binacional” agregó.

En la presentación de los resultados del estudio, Gustavo Dallarda, Director del Distrito 11 de Caltrans, destacó que el puerto de entrada de Otay Mesa East es un innovador proyecto de infraestructura fronteriza que acerca a la región a consolidar su visión binacional.

“Brindar opciones de transporte para trasladar personas y bienes a dónde, cuándo y cómo quieran ir es una inversión que mejorará nuestras comunidades, ayudará a nuestro planeta y fortalecerá las alianzas en la región de Cali-Baja”.

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