De acuerdo con el World Resources Institute México (WRI), en los últimos años, el país ha sido en América Latina una de las naciones más fuertes en el desarrollo de sistemas de transporte masivo y el que cuenta con varios proyectos en cartera para implementarse en diferentes ciudades.

No obstante, aunque es reconocible estos avances en desarrollo de infraestructura, se requiere de una política nacional que articule a todos los actores a fin de atender la movilidad como un todo y no solo como vialidades o sistemas de transporte.

Aquí es donde el papel de WRI México ha sido fundamental en el impulso de una agenda nacional y la conformación de una Asociación Mexicana de Autoridades de Movilidad (AMAM), la primera en su tipo en el país.

En el contexto del gasolinazo en los primeros meses del 2017la organización impulsó el primer encuentro de las autoridades responsables del transporte público concesionado, quienes se dieron cuenta que los problemas en esta materia ya eran consecuencia de un modelo de movilidad que conjuga la dispersión de actores y una institucionalidad muy limitada. Lo anterior Motivó el Pacto por la Movilidad, que a su vez sentó las bases de la AMAM.

Angélica Vesga, Directora de Asuntos Públicos y Comunicación de WRI México, explica en entrevista para TyT que, como una primera fase, el gran objetivo de la Asociación Mexicana de Autoridades de Movilidad es acelerar la transformación del transporte público a través del establecimiento de políticas y proyectos que faciliten el financiamiento, mejoren la calidad del servicio y fortalezcan la institucionalidad para atender este tema. Para cumplirlo, indica la organización, se requiere del intercambio constante de experiencias.

En esta etapa centrarán sus esfuerzos en cinco ejes prioritarios:  

  • Mecanismos de financiamiento. Establecer modelos de financiamiento óptimos, en los que haya correspondencia entre gobierno federal y local.
  • Institucionalidad. Las facultades de las autoridades que atienden temas de movilidad está dispersa a nivel nacional y local. Por ello se requiere contar con un prototipo institucional ideal y moldeable a las ciudades.
  • Calidad en transporte público. Avanzar en entender el estado mínimo de calidad, los modelos óptimos de concesión y sus auditarías.
  • Política tarifaria.
  • Ley de seguridad vial. El proyecto fue presentado en la Cámara de Diputados, donde se encuentra detenido. En ésta se incorpora la propuesta de una Agencia Federal de Seguridad Vial.

A un año de su primer encuentro, las autoridades trabajan paralelamente en su programa y en la constitución legal de la Asociación.

“La Asociación Mexicana de Autoridades de Movilidad todavía no está constituida legalmente, existen algunos acuerdos de voluntades a través del Pacto por la Movilidad, pero ya se eligió a un presidente y a una primera junta directiva. Entonces, el primer reto operativo en términos de temporalidad es la constitución oficial de ésta con los estatutos y el programa de trabajo”, detalla.

Vesga explica que los estatutos de la AMAM se han ido desarrollando mesa con mesa desde que se firmó el Pacto, el cual es ahora el cimiento de la Asociación bajo los principios de promover la sustentabilidad ambiental, la equidad -cómo ofrecer las mismas alternativas de movilidad a todos los habitantes de la ciudad-, y cero tolerancia a la corrupción. Además, incorpora las temáticas y los ejes de acción.