Para homologar su cobro, reducir la opacidad y mejorar el control vehicular, se  requiere un gran acuerdo nacional para reducir los conflictos que provoca la coexistencia de 32 esquemas y exenciones sobre el Impuesto a la Tenencia Vehicular derogado en 2007 y que los Estados siguen cobrando a pesar de recibir partidas económicas  para su sustitución, afirmó Guillermo Rosales.

El director adjunto de la AMDA comentó que “ahora tenemos un escenario donde los gobernadores ya se acostumbraron a  cobrar las contribuciones del Impuesto Especial Sobre Producción y Servicios (IEPS) y siguen recaudando el Impuesto por Tenencia Vehicular”.

El vocero de la Asociación comentó que cuando se derogó este Impuesto Federal en diciembre de 2007 por el Congreso, también se aprobó que a través del IEPS poco más de 40 centavos por cada litro de gasolina se distribuyera a los Estados, esto con el objetivo de que cuando llegara el 2012 hubiera una sustitución de recursos y dejar de recolectar la Tenencia.

“Esto les permitiría dejar de cobrar ese impuesto que más resistencia genera entre la población y obtener recursos mucho más razonables y ligados al consumo, donde quien use más el vehículo y contamina realice un pago mayor, contribuyendo de manera más justa”, dijo.

Las contribuciones del IEPS a los Estados, puntualizó Rosales Zárate, a nivel global son prácticamente iguales y en algún momento han superado lo que se recaudaba por Tenencia.

“Estamos en una situación donde se requiere de un gran acuerdo político nacional, ya que hay consecuencias más allá de cobrar o no ese gravamen, pues detrás de todo existe el desorden en el manejo de las finanzas públicas estatales”, afirmó.

Sobre los problemas generados por la diversidad de esquemas de pago del gravamen vehicular, el directivo de la AMDA explicó que al haber Estados donde no se paga tenencia, ha generado que en entidades como el Distrito Federal (D.F.) circulen muchos vehículos con placas de otras entidades como Estado de México, Morelos, Puebla y Querétaro, donde no se paga este impuesto, generando una falta de control sobre el parque en circulación.

“Y es que tan sólo en el D.F. y el Estado de México se lleva a cabo la venta del 36% del total de los vehículos a nivel nacional”, recordó.

Otro ejemplo que dio Rosales Zárate es en la Península de Yucatán, donde Quintana Roo no cobra tenencia, Yucatán ofrece un subsidio y en Campeche persiste su cobro, evidenciando la falta de acuerdos a nivel nacional entre los Gobiernos Estatales para llegar a una homologación.