México está ante la oportunidad de aprovechar la relocalización de empresas o nearshoring, atraídas por el T-MEC, fenómeno que derivará en una mayor generación de carga. Este hecho beneficiará a los transportistas, especialmente a los más grandes, y el hombre-camión debe trabajar en insertarse en el mercado. 

Hasta el tercer trimestre del año pasado, la Inversión Extranjera Directa (IED) en México permanecía en cifras récord, mientras que la industria inmobiliaria enfrentaba una elevada demanda de parques industriales. La pandemia y el posterior conflicto bélico entre Rusia y Ucrania aceleraron el nearshoring a nivel global, y México está dentro. 

La manufactura proveniente de Asia y Europa se está preparando para incrementar sus exportaciones hacia el norte del continente, principalmente hacia Estados Unidos, y el hombre-camión debe actuar en línea para aprovechar las oportunidades que están en puerta. 

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La unión hace la fuerza 

En entrevista con TyT, Claudio Gallegos, secretario general de la Confederación Nacional de Transportistas Mexicanos (Conatram), expuso que el hombre-camión no debe mirar la llegada de manufactura, a través del nearshoring, sin transitar hacia un esquema distinto, que le permita estar en la posibilidad de atender la futura demanda de movimiento de carga. 

El hombre-camión no puede atender un contrato, por ejemplo de una armadora que tiene movimientos definidos por semana y requiere de 50 a 100 o más unidades y ¿qué hace el hombre-camión con 1 o 5 camiones?, pues no podrá garantizar un servicio permanente o regular. Es una realidad”.  

Sin embargo, una de las formas en que el hombre-camión puede crecer es bajo ‘las empresas integradoras’. Como su nombre lo indica, la idea es que varios hombre-camión se integren para poder ser competitivos”. 

Claudio Gallegos, secretario general de Conatram.

Refiere que, si 10, 20 o más microempresarios se unen, tendrán 100 unidades en condiciones de ir con grandes generadores de carga a ofrecer sus servicios de transportación para ser considerados. 

Apertura del hombre-camión 

El Secretario General de Conatram sostiene que no todas empresas transportistas grandes nacieron así, antes fueron medianas o pequeñas unidades económicas; los factores que las caracterizan son su visión y disposición para crecer. 

El hombre-camión conduce el vehículo y administra su negocio, o le ayuda algún familiar. Hay que ver más allá, debe abrirse a la oferta, a las oportunidades generadas”. 

Si la demanda es para hacer viajes hacia Tijuana, pues el hombre-camión debe tener esa apertura de mover sus unidades fuera de su zona habitual. Hay que perder el miedo, porque quienes lo han logrado han crecido”

Claudio Gallegos, secretario general de Conatram.

Alternativa para enfrentar los elevados costos de operación 

A raíz de la pandemia y la guerra, los transportistas experimentaron un acelerado incremento de los precios de insumos, destaca el alza del diesel, llantas, neumáticos y otras partes; sin embargo, el hombre-camión al carecer de contratos está limitado para ajustar sus tarifas. 

Claudio Gallegos refiere que un 90% de los hombre-camión carece de un contrato firmado con algún generador de carga y al trabajar bajo la demanda surgida en el momento, tiene menor margen para negociar una tarifa. 

En cambio, la integración de hombre-camión en una sola empresa le daría la oportunidad de cerrar contratos con clientes, con un servicio más robusto y mejor estructurado. Aquí es donde nace la oportunidad de colocar tarifas que le den mayor margen de ganancias. 

¿Cómo cambiar el modelo organizacional del hombre-camión?

En su momento, Max Daniel Revuelta, especialista de la Facultad de Ingeniería de la Universidad La Salle, expuso para TyT distintos puntos para mejorar la competitividad y las finanzas de los microempresarios del autotransporte. 

  • Migrar hacia un modelo que les permita distribuir la riqueza generada por una flota de transporte entre varios transportistas. 
  • Girar hacia un acuerdo o una especie de cooperativa que los lleve a aliviar sus finanzas y poner sus mejores camiones a trabajar. Este punto sugirió la unión del hombre camión para formar una flota, como lo hacen los grandes. 
  • Mantenimiento y mejora de los equipos de la unidad. En este punto, Revuelta expuso que los operadores estarán ante un problema, si es poco el trabajo y sus unidades están en malas condiciones. 
  • Refirió que el hombre camión llega a trabajar para una sola empresa durante 30 o 40 años. Es decir, su negocio depende de una sola fuente de ingresos. Por ello, propuso revisar las condiciones y renegociar de forma que se atiendan las necesidades actuales de ambas partes. 

El especialista de la Universidad La Salle llamó al hombre-camión a migrar del beneficio personal o familiar que proporciona un tractocamión en servicio, hacia el beneficio grupal. Ello, con reglas y condiciones claras, en equipo, como lo hacen las grandes empresas. 

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