Bosch está seguro de que los camiones eléctricos de 40 toneladas podrán viajar más de 1,000 kilómetros en un futuro próximo. La clave, consideró la compañía, es su tren motriz de celdas de combustible, el cual cuando se alimenta con hidrógeno producido mediante energía renovable y posee un sistema de propulsión que permite el transporte de bienes cero emisiones.
Bosch informó que está dando el primer paso en esta dirección al desarrollar el tren motriz de celda de combustible con un enfoque en vehículos pesados de carga, y planea comenzar la producción en 2022-2023.
Por ello, la compañía de origen alemán citó siete razones por las que apuesta por el desarrolla esta tecnología, la cual será fundamental en la movilidad del mañana:
1. Neutralidad climática
Bosch destacó que la generación de esta electricidad a partir de energías renovables hace que el sistema de propulsión de celda de combustible sea completamente neutro para el clima. Especialmente para vehículos grandes y pesados, éstas tienen una mejor huella de carbono que los sistemas de propulsión exclusivamente eléctricos de batería si el CO2 las emisiones de producción, operación y eliminación se suman.
La compañía detalló que todo lo que necesitan los vehículos de celda de combustible, además de su tanque de hidrógeno, es una batería mucho más pequeña para el almacenamiento intermedio. Esto reduce en gran medida su huella de carbono en la producción
2. Aplicaciones potenciales
El hidrógeno tiene una alta densidad energética. Un kilogramo de hidrógeno contiene tanta energía como 3.3 litros de diesel. Para viajar 100 kilómetros, un camión necesita unos siete kilogramos. Además, al igual que con diesel o gasolina, se tarda solo unos minutos para llenar un tanque vacío H2 y continuar el viaje. “Las pilas de combustible son la primera opción para transportar cargas más grandes durante muchos kilómetros todos los días”, dijo Uwe Gackstatter, Presidente de la División de Soluciones de Sistemas de Propulsión de Bosch, resumiendo las ventajas.
3. Eficiencia
Uno de los factores decisivos para la rentabilidad y el respeto al medio ambiente de un tren motriz es su eficiencia. Los vehículos eléctricos a batería, explica Bosch, que pueden almacenar electricidad directamente en el vehículo y usarla para propulsión, son aún más efectivos. Sin embargo, dado que la producción de energía y la demanda de energía no siempre coinciden en tiempo y ubicación, la electricidad de las las plantas eólicas y solares a menudo no se utiliza porque no puede encontrar un consumidor y no se puede almacenar. Ahí es donde el hidrógeno entra en juego. El excedente de electricidad se puede utilizar para producirlo de manera descentralizada, listo para un almacenamiento y transporte flexible.
4. Costos
El costo del hidrógeno verde se reducirá considerablemente cuando se amplíen las capacidades de producción y disminuya el precio de la electricidad generada a partir de energías renovables. Bosch está trabajando actualmente con la start-up Powercell para desarrollar una solución de alto rendimiento que se pueda fabricar a bajo costo.
5. Infraestructura
Bosch reconoce que la red actual de estaciones de servicio de hidrógeno no ofrece una cobertura completa, pero las aproximadamente 180 estaciones de servicio de hidrógeno en Europa ya son suficientes para algunas rutas de transporte. Además, señaló, empresas de muchos países están cooperando para seguir adelante con la expansión, a menudo con el apoyo de subsidios gubernamentales.
6. Seguridad
El uso de hidrógeno gaseoso en vehículos es seguro y no más peligroso que otros combustibles o baterías automotrices. Los tanques de hidrógeno no presentan un mayor riesgo de explosión.
7. Tiempo
La compañía reveló que la producción de hidrógeno es un proceso probado y tecnológicamente sencillo, lo que significa que se puede aumentar rápidamente para satisfacer una mayor demanda. Además, las celdas de combustible han alcanzado la madurez tecnológica necesaria para su comercialización y uso generalizado.
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