Actualmente, el Aeropuerto Internacional Benito Juárez de la Ciudad de México maneja unas 500,000 toneladas de carga al año, y se espera que el NACIM permita mover hasta 2 millones de toneladas, lo que equivale a mover hasta cuatro veces más carga que el actual recinto aéreo.

De acuerdo con personal responsable de la obra, el NAICM contará con una terminal de carga de 84 hectáreas (la actual tiene 13), y estará arriba de la de pasajeros. Sin embargo, aunque sí se contemplan espacios destinados para el movimiento y resguardo terrestre de mercancías, a la fecha todavía no existe un plan para ello.

En conferencia a medios, Antonio Arranz, CEO de DHL Express México, aseguró que por el aeropuerto actual pasa el 52% del total de la carga aérea que se mueve a nivel nacional, pero la infraestructura ya está saturada y es imposible continuar con ese ritmo más allá de 2020, dijo.

Para el directivo, potenciar la capacidad logística del Nuevo Aeropuerto permitiría a la empresa entregar paquetes internacionales incluso dentro de las primeras 24 horas desde su llegada. “Actualmente en DHL hacemos lo posible por realizar operaciones lo más sencillas posible, pero la realidad es que hay ciertos pasos que toman mucho tiempo, principalmente por falta de infraestructura y coordinación”.

Uno de los aspectos que más padece retrasos es el despacho de mercancías en los recintos fiscalizados, precisamente por que ya no hay espacio, a pesar de que en el actual aeropuerto hay 18 recintos fiscalizados. «Lamentablemente, esos recintos datan de los años 70, por lo que es evidente que han quedado rebasado», aseguró.

Preocupa que se disparen las prácticas monopólicas

De acuerdo con personal que dirigió una visita guiada a medios por el nuevo recinto aéreo, es evidente que la nueva terminal de carga será clave para convertir a México en una plataforma logística de alcance global.

Sin embargo, de acuerdo con Arranz, la mayor preocupación que tienen DHL -y otras empresas logísticas-, es el modelo que habrá de definir el Grupo Aeroportuario de la Ciudad de México (GACM) – NAICM, para diseñar, construir y operar la terminal de carga. “Lo ideal es que, independientemente del esquema, ya sea de inversión privada o por licitación, se garanticen precios competitivos y una asignación justa de los espacios. Desde DHL ya hemos presentado propuestas al Grupo sobre casos de éxito en otros Aeropuertos. Refrendamos nuestro compromiso de mantenernos en estrecho vínculo para lograr que las cosas se realicen de la mejor manera posible”, manifestó.

Cabe señalar que DHL Express cuenta con un hub logístico de 1,500 metros cuadrados en el aeropuerto actual, desde donde mueve un promedio de 60 toneladas de carga diarias. «En el nuevo aeropuerto queremos tener unos 10,000 metros», dijo Arranz.

Y añadió, que en última instancia, DHL ya contempla fortalecer sus operaciones en el país desde dos grandes hubs para soportar el crecimiento del comercio local: uno sería el del NAICM, independientemente de su extensión, y el segundo desde Querétaro.

“Para DHL, México representa el 5º mercado más importante en cuanto a operaciones logísticas, y en el plan global de crecimiento para 2020 es el primero en cuanto a interés para invertir, hablando de países en desarrollo”, finalizó el directivo.