Si bien las interrupciones en la cadena de suministro siguen suponiendo un desafío para los fabricantes de remolques en Estados Unidos (EU), ahora la escasez de mano de obra se ha convertido en la principal limitación para esta industria, señala Don Ake, Vicepresidente de Vehículos Comerciales de FTR Transportation Intelligence.

“El flujo de materias primas ha mejorado e incluso han aumentado las entregas de piezas importadas, pero el nivel de empleo en los OEM también es un problema importante”, dijo el especialista.

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Reveló que incluso hay un fabricante de equipo original (OEM, por sus siglas en inglés), que ofrece bonos de inicio de mil dólares para todos los trabajadores de sus plantas, y es que se anticipa que la construcción de remolques aumentará de manera constante una vez que se relajen las restricciones laborales en EU.

En este contexto, cabe recordar que el avance de ómicron ha representado un desafío debido al incremento del ausentismo laboral, que se suma a la intención del Gobierno de Joe Biden de exigir a las empresas de más de 100 colaboradores que reforzaran las medidas para combatir la pandemia, las cuales implicaban la vacunación obligatoria de sus empleados o la aplicación semanal de pruebas. Dicha propuesta fue frenada por la Suprema Corte de EU, aunque diversas compañías mantienen políticas estrictas similares a la planteadas por el Gobierno.

Los datos más recientes del Departamento del Trabajo de EU revelan que 4.5 millones de estadounidenses renunciaron a su empleo en noviembre, la cifra más alta en la historia del país. Se trata de un fenómeno denominado “La Gran Renuncia”.

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Respecto al comportamiento del mercado de remolques en el país, FTR detalla que los pedidos para diciembre se colocaron en 26,500 unidades, un aumento mensual del 18 por ciento, pero una caída del 42% interanual.

Asimismo, las órdenes en 2021 totalizaron 249,000 unidades, 16.1% menos que en 2020, año que incluyó cifras raquíticas en la primavera debido al primer golpe de la pandemia a esta industria.

FTR destacó que los OEM continúan administrando los pedidos atrasados con cuidado, ante la escasez de mano de obra y las interrupciones en la cadena de suministro.

Y si bien el volumen de pedidos estuvo muy cerca del promedio de los tres meses anteriores, los fabricantes de remolques están reservando pedidos por lotes a la vez, ya que calculan cuántas unidades pueden construir en los próximos meses en función de la disponibilidad de piezas y componentes.

Por su parte, las flotas anticipan la necesidad de una gran cantidad de remolques en los próximos meses, pero los OEM son reacios a ingresar todos los compromisos en la cartera de pedidos en las condiciones actuales.

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“El mercado de remolques se ha asentado en un patrón similar al de los camiones Clase 8. Los pedidos ahora tienen un promedio de 26,000 unidades durante los últimos cuatro meses, solo unos pocos miles más que la producción mensual. Eso significa que los retrasos solo han aumentado un 6% a pesar de que existe una gran demanda de nuevos remolques. No se verán que las cifras aumenten constantemente hasta que haya suficientes piezas y mano de obra para respaldar una producción significativamente mayor”, comentó Don Ake.

Por su parte, Frank Maly, Director de Análisis e Investigación de Transporte CV en ACT Research, comentó que 2021 cerró con una relación entre acumulación y construcción de ocho meses, lo que significa que la producción de la industria de remolques está comprometida, en promedio, hasta agosto a las tasas de construcción actuales.