El presidente Andrés Manuel López Obrador no descartó la posibilidad de permitir el retorno a la operatividad de actividades económicas no esenciales en el país a partir del 17 de mayo, esto es una ventana abierta para que la industria automotriz en México arranque motores este mes. 

En conferencia diaria, López Obrador expuso que su Gobierno tiene pensado “reiniciar la apertura de actividades poco a poco, por regiones y cuidando las medidas sanitarias (…) el 17 de mayo en algunas partes (de México) y a finales de este mes en (todo) el país”.

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Dijo que esta medida, analizada por el equipo de expertos y especialistas del sector Salud, incluye el retorno a la actividad en la construcción y minería, debido a su importancia en la economía y a que es posible un control sanitario; y el caso de la industria automotriz, por su estrecha relación con el sector en Estados Unidos y Canadá.

Está también lo de la apertura para la industria automotriz, lo que tiene que ver con la producción de autopartes, porque hay una relación estrecha son cadenas de producción que se dan entre México, Estados Unidos, e incluso Canadá”. 

Andrés Manuel López Obrador, presidente de México.

En abril pasado, la Asociación Nacional de Productores de Autobuses Camiones y Tractocamiones (ANPACT) refirió que la rama industria en México debe retomar actividades entre tres y cinco días antes que las armadoras en Estados Unidos, para cumplir con la demanda de insumos. 

Adicional, junto con la Asociación Mexicana de la Industria Automotriz (AMIA) y la Industria Nacional de Autopartes (INA) envió una carta al Consejo de Salubridad General para solicitarle la designación de la industria como “sector esecial de la economía”.

En ella argumentaron que “todos y cada uno de los centros de trabajo (en el sector) cumplen y en la mayoría de los casos, exceden los protocolos de control sanitario y están totalmente alineados a lo presentado por la Secretaría de Salud en el Acuerdo de Medidas Extraordinarias publicado el 31 de marzo”. 

Mientras continúan las negociaciones entre las armadoras y proveedoras y las autoridades de Salud y Economía en México, en Estados Unidos, Mercedes-Benz se reincorporó a la actividad el pasado 27 de abril. 

En México, la armadora postergó la reapertura de su planta ubicada en García, Nuevo León, del 4 de mayo a un posible regreso este 11 de mayo.

En tanto, las surcoreanas Hyundai y KIA abrieron este lunes 4 de mayo sus plantas ubicadas en Alabama y Georgia, respectivamente. Esto sin al anuncio de una fecha tentativa para México.

Así, en el país gobernado por Donald Trump, se tiene previsto que a partir del 18 de mayo numerosas armadoras se reincorporen a la producción.

Sector automotriz, casi dos meses estacionado

A partir del 23 de marzo, cuando México estaba a punto de entrar a la fase II de la pandemia, con 405 contagios y cinco muertes, Toyota, Honda, Audi, GM y Nissan anunciaron el paro temporal de sus plantas en el país. 

La nueva realidad impuesta por el COVID-19 alcanzó a las 21 armadoras de vehículos ligeros y 11 de pesados que operan en el país, así como su cadena de proveeduría y pisos de venta.

El objetivo principal de las armadoras fue detener la propagación del coronavirus CVID-19. Poco después, el 30 de marzo, el Gobierno federal declaró emergencia sanitaria por COVID-19 a partir de ese día y hasta el 30 de abril. 

Acción que obligó a frenar actividad a todas las empresas no esenciales para la economía de México. La declaratoria se extendió al 30 de mayo, y de acuerdo con la Secretaría de Salud, este 6 de mayo se vivirá en el país el pico máximo de contagios.