Con la acelerada evolución de las tecnologías emergentes y las nuevas tendencias en la manera de hacer negocios, es necesario que las organizaciones se adapten a los cambios constantemente para mantenerse y crecer en el mercado y para eso el área de Finanzas es fundamental.
Y es que una de las grandes enseñanzas que dejó la pandemia fue que la resiliencia es clave no sólo para sobrevivir, sino para aprovechar las oportunidades que se presenten, de tal manera que las empresas que no lo hagan, se encontrarán en una gran desventaja.
En sentido opuesto, una empresa actualizada es capaz de superarse en cuanto a eficiencia, calidad y velocidad de las operaciones, pues de acuerdo con un estudio realizado por KPMG, el departamento de Finanzas debe tener en cuenta cinco acciones para transformar el área de cara al futuro y los retos del mercado:
- Definir una estrategia financiera
Una estrategia financiera definida por la visión de la empresa, que incluya un plan a corto, mediano y largo plazo, impulsará al departamento de Finanzas a guiar al negocio de una manera exitosa.
- Optimizar el flujo de efectivo
Además de reducir gastos, es importante tener un enfoque integral que optimice el flujo de efectivo y la gestión del capital de trabajo. La adopción de las tecnologías emergentes permite a la función de Finanzas tomar decisiones con mayor nivel de detalle e identificar áreas de oportunidad de manera oportuna.
- Impulsar a la función como un socio del negocio
Es importante que la organización vea al departamento de Finanzas como un aliado que brinde soporte para alcanzar los principales objetivos de negocio.
- Evolucionar a nuevos sistemas tecnológicos
Los sistemas con un enfoque financiero pueden facilitar la planeación a corto, mediano y largo plazo para aumentar la certeza en las proyecciones y el manejo de los recursos. Como estos sistemas evolucionan día con día, es importante mantenerlos actualizados.
- Habilitar competencias digitales
La digitalización del flujo de información de un negocio es crítica para la transformación de cara al futuro, pues provee beneficios en la agilidad, calidad y alcance de la información generada.
Además, es importante contemplar las tendencias en el mercado para considerar las inversiones que el departamento de Finanzas podría implementar, tomando en cuenta los siguientes puntos:
- Contar con una herramienta de análisis de datos que dé una visión integral de la compañía para la toma de decisiones.
- Definir una solución tecnológica para tener certeza en la planificación y proyección financiera.
- Considerar sistemas de inteligencia artificial para aumentar la eficacia, reducir costos e impulsar la eficiencia de la organización.
- Invertir en capital humano y en las capacidades financieras del equipo.
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KPMG México concluye que las organizaciones y la función de Finanzas tienen un reto para afrontar la constante evolución de los procesos, tecnologías emergentes y de recursos para mantener la ventaja en el mercado sobre sus competidores.
