En la Central de Abastos, el transporte de carga moviliza mercancías con un valor anual de 9,000 millones de dólares; se trata del espacio comercial más importante de América Latina y una oportunidad de mercado para la tercerización de las entregas y la digitalización de los modelos logísticos de distribución, sostuvo Lalamove. 

Todos los días arriban a la Central de Abastos un promedio de 3,500 vehículos de carga y de 500,000 visitantes, este movimiento de personas y mercancías, aunado a los avances tecnológicos y las necesidades de la realidad actual exigen la digitalización de este espacio mayorista, planteó Lalamove. 

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La empresa de entregas OnDemand expuso en un comunicado que uno de los pasos más importantes en la transformación de este mercado de abasto ha sido construir nuevos modelos de distribución, por medio de la tercerización de las entregas. 

Refirió que este modelo de negocio es un más rentable para los vendedores en la Central de Abastos, en lugar de tener una flotilla propia, gracias a los menores costos por un servicio más especializado, la velocidad de entregas y la variedad en la oferta de vehículos. 

Lalamove añadió que con las entregas tercerizadas también se accede a la oportunidad de digitalizar los procesos logísticos para atender las grandes necesidades de los comercios, con procesos 100% automatizados y un equipo de gran conocimiento en software, temas operativos y ventas. 

El resultado de esta confinación, dijo, permitirá a los empresarios de la Central de Abastos realizar entregas en 24 horas, con rutas optimizadas y paradas múltiples, es decir, mayor rentabilidad – con menores costos operativos– y clientes más satisfechos. 

En este contexto, Lalamove detalló que ya avanza en la oferta de sus servicios en la Central de Abastos, con empresas como Frubana y Muni, ambas de origen colombiano, con quienes manejan volúmenes de entrega que varían desde dos hasta 17 o 18 unidades por cliente y 30 a 40 de manera general. 

“Estamos muy bien posicionados, con precios sumamente competitivos pues no tenemos tarifas dinámicas, ni otro tipo de comisiones extras, pagas los kilómetros que usas”, comentó Alberto Argaiz, gerente de operaciones para conductores en Lalamove México. 

En cuanto a los retos, la empresa especializada expuso que si bien la Central de Abastos ha aceptado de forma adecuada los cambios digitales surgidos en 2019, el reto es tener mayor acercamiento con los clientes potenciales, así como lograr el equilibrio entre el supply de vehículos y la demanda de los clientes. 

Otra de las labores a realizar entre las empresas establecidas en la Central de Abastos es lograr que confíen mucho más en las plataformas digitales a través de la difusión de información sobre las ventajas de migrar hacia un ecosistema 100% electrónico.