La Cámara Nacional del Autotransporte de Carga (CANACAR) cabildea con el Gobierno federal una agenda económica que incluye dar marcha atrás a los cambios fiscales para el sector previstos en la Ley de Ingresos para 2020.

 

Enrique González, presidente nacional del organismo, manifestó en entrevista para TyT que para el autotransporte de mercancías estos ajustes significan nuevos impuestos.

 

“No hay nuevos impuestos (marcados por el Ejecutivo), pero éste sí sería uno nuevo para el sector del autotransporte”, expresó, “no queremos mencionar que es algo perdido o ganado (los ajustes fiscales para el próximo año), pero se trató hacer algo desde la Cámara de Diputados donde se presentó dicha iniciativa, y vamos a buscar algunos otros esquemas para que logremos que esta situación se siga reconociendo simplemente para tener mayor profesionalismo y fortaleza del transporte”.

 

El 25 de noviembre se publicó en el Diario Oficial de la Federación la Ley de Ingresos 2020 con dos ajustes fiscales que impactarán en el flujo de efectivo de los empresarios transportistas, el cual es indispensable para hacer frente a gastos que requieren pagos de contado.

 

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El primero de ellos es sobre el estímulo del IEPS por el uso de infraestructura carretera, el cual fue acotado solo a los contribuyentes que no rebasen los 300 millones de pesos en ingresos en un ejercicio. El segundo aplicará en actividades no objeto de IVA, que impactará a compañías transportistas con operaciones en el extranjero.

 

El líder nacional del gremio consideró que el límite en la acreditación de peaje en autopistas va en contra de fortalecer la formalidad en las empresas transportistas y desfavorece a medianas y grandes compañías.

 

“En las empresas pequeñas y micro es donde se encuentra acentuada la informalidad. Esta postura no es pareja y, junto con la Canapat y el área fiscal de Concamin, estamos llevando una estrategia conjunta y un acercamiento con la Secretaría de Hacienda”, indicó.

 

El gremio también ha mantenido reuniones con Alfonso Romo, jefe del gabinete del Presidente Andrés Manuel López Obrador, para intentar que los empresarios del transporte tributen el próximo año como lo venían haciendo. “Fueron muy receptivos en entendernos y obviamente como efecto de esas reuniones que hemos tenido con Alfonso Romo. Le mencionamos la situación que tenemos hoy por hoy con Hacienda”, agregó.

 

Sobre el IVA no objeto, el líder del organismo señaló que la medida deja a las empresas de autotransporte con operación en el extranjero en un escenario desfavorable, por lo que han solicitado al Ejecutivo tasa cero en importaciones.

 

“Buscamos que la industria nacional esté al parejo de la americana”, dijo, “en materia de exportación sí tenemos IVA tasa cero, en importación de servicio teníamos el IVA no objeto, pero ahora ya no lo permiten acreditar. Entonces, estamos buscando que ambos sean en base a tasa cero para que estemos en igualdad de circunstancias con las empresas americanas que dan servicio de importación y exportación en el traslado de mercancías”.

 

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González externó que el T-MEC no dejó una satisfacción al 100% a la industria del autotransporte, debido a que ya no se les van a otorgar permisos de largo recorrido para servicio de transporte de carga transfronteriza, y no de la misma manera hacia las empresas americanas. 

 

La CANACAR manifestó que las autoridades federales se comprometieron a que los estímulos fiscales seguirían igual, “pero pueden cambiar las cosas de la noche a la mañana. Nos estamos ocupando del IVA no objeto o de la tasa cero, y estamos preocupándonos con la acreditación del peaje”. El sector está a la espera de las facilidades administrativas para seguir accediendo a los mismo estímulos fiscales.