La entrada indiscriminada de vehículos chatarra ha ido en aumento, de 2012 a 2013 el porcentaje de importados se incrementó en un 78%, activando así los focos rojos de la industria del autotransporte, situación que pone en riesgo la competitividad del sector, y,  en consecuencia, la seguridad de los mexicanos, el medio ambiente y la estabilidad de miles de familias que dependen de esta actividad.

Miguel Elizalde, Director de la Asociación Nacional de Productores de Autobuses, Camiones y Tractocamiones (ANPACT) señaló que de continuar esta tendencia y debido a que la cifra de exportaciones se ha incrementado de mil a 100 mil unidades en los últimos 20 años, México podría convertirse en un país netamente exportador, en donde las unidades manufacturadas aquí volverían años después, pero  convertidas en chatarra.

Sin embargo, el dirigente de la ANPACT confía en que mediante la colaboración de todos los actores de la industria y la respuesta de los Poderes de la Unión, podrán evitarse estas consecuencias.

Cada quien su parte

La industria del autotransporte  tiene claras las demandas para cada uno de los tres Poderes de la Unión. Al Ejecutivo le corresponde revisar la actualización del esquema de chatarrización para incrementar los estímulos fiscales a 250 mil pesos por unidad, lo cual alentaría la chatarrización para alcanzar la cifra de 15 mil vehículos anuales e incentivaría el crecimiento del mercado interno.

Por su parte, el Poder Legislativo deberá trabajar en la iniciativa para reformar los artículos 35, 39 y 50 de la Ley de Caminos, Puentes y Autotransporte Federal, la cual fue presentada hace un año y actualmente se encuentra en la Comisión de Comunicaciones y Transportes del Senado de la República.

Finalmente, a la autoridad Judicial le corresponde revocar los amparos interpuestos ante las Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales; la Secretaría de Economía y la de Hacienda; dichos recursos han facilitado la entrada de camiones usados que no cumplen con los estándares requeridos.