Tras 52 días de emergencia por la crisis sanitaria, el Gobierno federal anunció para el próximo lunes la conclusión de la Jornada Nacional de Sana Distancia y el inicio del retorno para nuevos sectores económicos esenciales, entre ellos la industria automotriz.

En esta reapertura, las empresas de dichos sectores están modificando su forma de trabajar para garantizar la seguridad e higiene en sus operaciones, debido a que la reactivación coincide con el avance de la pandemia de COVID-19.

Las autoridades federales marcaron que entre el 18 y el 31 de mayo, las compañías de los sectores definidos como nuevos esenciales –industria automotriz, construcción y minería– debían prepararse con la elaboración de protocolos sanitarios, capacitación de personal para la seguridad en el trabajo, readecuación de espacios y procesos productivos, implementación de filtros de ingresos y la sanitización del espacio laboral.

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Más allá de la sana distancia, el uso de cubrebocas y gel a base de alcohol, las medidas a aplicar en la industria automotriz deben cumplir con el objetivo de operar bajo un mínimo riesgo sanitario, únicamente con el personal en sitio que sea estrictamente necesario y mantener el trabajo a distancia para quienes puedan hacerlo. 

Segundo García Hinojos, experto en Derecho en materia laboral, explica que las medidas de seguridad e higiene a aplicar coinciden en todos los sectores económicos. 

Esto es, como medidas mínimas requeridas, se debe proporcionar a los trabajadores equipos de protección personal, limpiar las superficies de forma constante con cloro, tomar temperatura a los colaboradores y llevar a cabo una bitácora de seguimiento del personal a su ingreso, así como conservar los baños limpios con agua, jabón y gel desinfectante.

En Estados Unidos, se reprogramó que 13 plantas de la industria automotriz retomaran operaciones entre el 4 y 11 de mayo. Entre los fabricantes se encuentran Honda, Toyota, Subaru, BMW, Volvo, Mercedes-Benz, KIA y Hyundai. 

Los protocolos de seguridad e higiene que aplica la industria automotriz son la aplicación de cuestionarios para saber si los trabajadores presentan algún síntoma, toma de temperatura antes de ingresar a las plantas, uso obligatorio de guantes, cubrebocas y caretas, distancia social de 1.8 metros entre cada trabajador, turnos escalonados y barreras de plexiglás cuando es posible. 

Estas medidas coinciden con las de Volkswagen Caminhoes y Onibus, fabricante de vehículos comerciales las marcas VWCO y MAN, que reanudó actividades en Resende, Brasil, el 27 de abril. 

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La compañía implementó la limpieza de autobuses alquilados para el transporte de personal y reducción del número de usuarios en cada vehículo, control de densidad de empleados, restricción de la capacidad en comedores, y uso de máscaras y equipo de protección individual. 

Además, entrega de máscaras desechables para visitantes y conductores, refuerzo en la limpieza de espacios de uso común, colocación de varios puntos de distribución de alcohol en gel, suministro de material para equipos de limpieza, apoyo médico para empleados y familiares, instalación de nuevos lavabos para higiene de manos y comunicación constante con medidas preventivas.

En México, fabricantes como Daimler Trucks comenzaron desde mediados de marzo la planeación de las medidas de seguridad e higiene. Estas acciones se han ido fortaleciendo con base en la experiencia de plantas hermanas alrededor del mundo y con los lineamientos del Gobierno federal.

Lo que dice la autoridad en México

Para la reapertura de las nuevas actividades económicas –incluida la industria automotriz– y las que se mantienen operando desde la crisis sanitaria, el Gobierno federal preparó un manual de sanidad, en el que participaron la Secretaría de Economía, del Trabajo, de Salud y el IMSS.

Se trata de un lineamiento técnico que estará vigente hasta en tanto se declare terminada la emergencia sanitaria que la originó.

En éste se exige evitar el hacinamiento en espacios y garantizar la disponibilidad permanente de agua potable, jabón, papel higiénico, gel con base de alcohol al 70% y toallas desechables para el secado de manos.

Establecer horarios alternados de comidas y actividades cotidianas para reducir el contacto entre personas, e incrementar el número de vehículos destinados al transporte de personal con el fin de reducir el hacinamiento y la posibilidad de contagios, manteniendo una sana distancia y la ventilación natural del transporte.

Se deberá poner en marcha un control de ingreso-egreso de los trabajadores, clientes y proveedores que permita establecer un filtro para la identificación de personas con infección respiratoria aguda.

Para las personas trabajadoras que se detectaron con signos de enfermedades respiratorias y/o temperatura corporal mayor a 37.5 °C, designar un área de estancia y aislamiento, dotarlas de un cubrebocas y remitirlas al domicilio particular y/o servicios médicos.

Proporcionar solución gel base alcohol al 70% para el lavado de manos y verificar el uso apropiado de cubrebocas.

En caso de ser posible, colocar tapetes desinfectantes con concentraciones de hipoclorito de sodio de al menos 0.5%, asegurando que los mismos se encuentren limpios y con líquido desinfectante. 

Establecer entradas y salidas exclusivas del personal. En caso de que se cuente con un solo acceso, se deberá dividir por barreras físicas a fin de contar con espacios específicos para el ingreso y salida del personal.

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