Ante un alarmante  inicio de año en el que la cifra de pesados importados de Estados Unidos superó la de unidades nuevas vendidas en México, la Cámara Nacional del Autotransporte de Carga (Canacar), la Asociación Nacional de Productores de Autobuses, Camiones y Tractocamiones (ANPACT)  y la Asociación Nacional de Transporte Privado (ANTP) se reunieron para exponer la complicada situación que atraviesa la industria y solicitar la colaboración de los tres Poderes de la Unión para revertir esta situación por el bien de todos los involucrados en el sector.

Durante el 2013 la entrada de unidades chatarra aumentó un 78% con respecto al año anterior, situación que afecta la competitividad, seguridad y condición ambiental de nuestro país.

Los directivos de los tres organismos compartieron las alternativas que ofrecen desde sus diferentes trincheras. Miguel Elizalde, director de la ANPACT fue contundente en su declaración acerca de la problemática del autotransporte nacional: “En México circula lo que en Estados Unidos va camino al deshuesadero”.

Elizalde declaró que la actualización del esquema de chatarrización, vigente desde el 2008, sería una alternativa para incentivar esta acción. Señaló que es necesario incrementar la cantidad de 160 mil pesos a una más atractiva de 250 mil pesos, así como la opción de hacer efectivo el 2×1, es decir, que se pueda acumular la suma de dos unidades chatarrizadas. Para que este programa pueda considerarse exitoso, el responsable de la ANPACT señaló que sería  necesario que se chatarrizaran 15, 000 vehículos al año.

Por su parte, Roberto Díaz, Presidente de la Canacar, señaló que la apuesta para contrarrestar la entrada de unidades chatarra está en la modernización del parque vehicular, apoyando programas enfocados a la renovación de las unidades. El objetivo es reducir la antigüedad de las flotas de 18 a 10 años.

Ambos dirigentes coinciden en que las unidades usadas que entran a nuestro país, se integran a los segmentos de hombre camión y pequeños transportistas, los cuales representan el  97.7% de empresas de autotransporte. Los compradores, guiados por “coyotes”, introducen vehículos irregulares, cuya compra parece muy conveniente al principio, pero a la larga, deriva en la  importación de problemas, señaló Miguel Elizalde.

Destacaron que el 91% de los vehículos que cruzan la frontera lo hacen a través de amparos, los cuales deben ser revisados por la Suprema Corte de Justicia para evitar las mañas y malas prácticas que derivan en la importación irregular de unidades.

Por su parte, Leonardo Gómez Vargas, Director General de la ANTP destacó que la competitividad del autotransporte, sólo se logrará haciendo uso de unidades que garanticen la seguridad, la eficiencia ecológica y la entrega de mercancías en tiempo y forma; lo cual es imposible de garantizar con el uso de unidades usadas irregulares.

Luis Eduardo Lara, Director General de Auditorias en las Operaciones de Comercio Exterior del Servicio de Administración Tributaria (SAT), señaló que en respuesta a la problemática de la industria, se conformó un grupo de trabajo en conjunto con la Secretaría de Economía, La Procuraduría Federal del Consumidor y la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales.

El representante del SAT señaló que ya se iniciaron 34 actos de fiscalización, lo que representa el 80% de las empresas que realizan el ingreso de unidades chatarra a México.

Los asistentes a esta reunión recalcaron la importancia de trabajar juntos para revertir el panorama adverso y lograr la competitividad del autotransporte.