La industria 4.0 ha venido a instalarse en diversas actividades y de pronto los conceptos de nube, Internet de las cosas (IoT), big data, por mencionar algunos, ya son parte de las empresas, pero ¿pueden aplicar para las flotas de autotransporte?

A través de la experiencia de tres exitosas empresas del sector, el Consejo Nacional de Ejecutivos en Logística y Cadena de Suministro, A.C. (Conalog) responde que sí. Se trata de la industria 4.0 en el transporte: el transporte 4.0, la optimización de los procesos a través de la adopción de nuevas tecnologías.

Durante el webinar “Transporte 4.0.  Evolucionando al Eslabón Fundamental de la Cadena de Suministro”, Gustavo Equihua, Presidente de Conalog y CIO de Frialsa, explicó que este concepto está muy relacionado con la automatización de procesos, nubes que permiten procesamiento y almacenamiento de información, así como IoT en los sensores de unidades que permiten visibilidad en toda la cadena de suministro.

¿Cómo aplican el Transporte 4.0 las flotas en México? Los panelistas invitados por Conalog lo explican:

Visibilidad con conectividad

Para Diego Anchustegui, Director Comercial de Transportes EASO, una clave es la visibilidad que la tecnología ofrece a los clientes; no se trata de la misma visibilidad que el transportista tiene sino darse cuenta lo que el cliente realmente quiere y no solo eso, sino que todo se comunique automáticamente.

En su opinión, lo que los clientes desean ver es los embarques problemáticos y sus soluciones, costos, data utilizable sobre sus socios de negocio (descargas a tiempo, dónde están los ahorros, qué está generando valor). El objetivo es que el cliente conozca estos parámetros sin tener que estar viendo un mapa, sino tenga acceso a la información de una forma más amigable.

En respuesta a ello, Transportes EASO tiene su propia aplicación en la que puede visualizar la actividad de los operadores: si está disponible, en mantenimiento, en ruta, cuál es su carga, si ya se le pagó y todas las evidencias de despacho.

El objetivo final de EASO es lograr que la visibilidad se combine con la conectividad para que desde una plataforma los clientes generen las órdenes de servicio, el sistema busque y asigne la mejor opción disponible entre los activos de la flota, el operador recibe la orden desde su aplicación y realiza su viaje mientras todo el tiempo se puede ver a través del GPS, al final, el cliente podrá tener certeza del momento en el que su carga arribe a su destino.

El reto, dijo Anchustegui, es que algunos transportistas aún no se han preguntado cuáles son las necesidades tecnológicas de sus clientes.

Saber lo que me agrega valor

Por su parte, Pablo Ocampo, fundador y CEO de Mexamerik, comentó que un primer paso es preguntarse cuál de todas las tecnologías disponibles es la que agrega valor a la flota, pues no todas las innovaciones disponibles van con cualquier empresa.

Se trata de buscar cuáles ayudan la cultura de la compañía y la estrategia empresarial, es decir, que sumen al propósito de la organización.

Una vez que se han seleccionado, al adoptarse en la empresa se pueden obtener datos en tiempo real y que, integrados, se forma un big data; con esa información de valor para la toma de decisiones y mejorar los procesos de la empresa.

Los beneficios de estas herramientas ofrecen indicadores de desempeño para clientes y colaboradores, reducen riesgos, tener un nivel de servicio diferenciad y registrar un crecimiento sustentable.

Analítica empresarial

Finalmente, Julio Encinas, Director de Desarrollo Estratégico e Ingeniería de Mexlog, explicó que esta flota cuenta con cinco plataformas para ingresar información: Mexlog 3.0 (sistema propio), Samsara, bases de datos depuradas, IoT (control de entradas y salidas de terminales) y simulador (un proyecto pionero en su segmento de servicios, se trata de un software específico de simulación de cuatricuernas y tricuernas); los cuales alimentan a la analítica empresarial.

“Todos estos inputs, estas entradas, son grandes tecnologías que no llenan de información pero es muy importante tener una claridad de que vas a hacer con esos datos, es muy importante tener una visibilidad completa para recibir esos datos”, dijo.

Se trata de una infraestructura sólida de big data, pues sin ella, el transportista solo se llenará de datos. “Hay que procesar esos datos, convertirlos, digerirlos, para que sea información útil para soportar un proceso de toma de decisiones, de no ser así no va a servir mucha información almacenada”, agregó.

El resultado es el desarrollo de KPIs y áreas de oportunidad en capacitación de los operadores.

Por ejemplo, Julio Encinas, Mexlog trabaja con la plataforma Samsara para analizar el comportamiento de conducción de sus operadores. A través de la analítica empresarial, se identificó a un conductor con 37% más alertas de exceso de velocidad en comparación con otros operadores. Con esos datos, se determinó tener un entrenamiento enfocado en la solución de ese problema, así como un programa de monitoreo y evaluación.

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