Mientras más grandes son las flotas, más exigente se vuelve la programación de las revisiones preventivas a las que son sometidos sus vehículos. Al respecto, Juan Menchaca, Gerente de Talleres y Refacciones Monterrey, empresa responsable del mantenimiento de las 1,800 unidades que componen las seis empresas de GrupoTransportes Monterrey (GTM), destacó que de acuerdo con las rutas y kilometraje de los automotores, se programan las fechas de mantenimiento al que cada uno debe someterse, bloqueando por completo su salida hasta que no se le haga la revisión pertinente.

Explicó que cuando se trata de arreglos que requieren más de un día de atención, configuraciones de equipo o reparación por colisión, las unidades son enviadas al taller central ubicado en Escobedo, Nuevo León. Para este procedimiento se emite una orden de servicio por parte de la empresa del Grupo que solicite la reparación y se le asigna un técnico que será responsable de su atención.

El especialista expresó que el principal reto que enfrenta el mantenimiento hoy en día, radica en hacerlo más sencillo y espaciado sin sacrificar la eficiencia de las unidades. Para ello, dijo que los componentes de vida extendida han resultado de gran utilidad en su flota, ya que permiten alargas los tiempos de servicio, garantizando la operación óptima de sus partes.

Menchaca añadió que otro de los temas que cada vez cobra más relevancia es el del mantenimiento predictivo, el cual se basa en adelantarse a las fallas que pudiera presentar una unidad para actuar de manera oportuna y evitar cualquier contratiempo en la operación.

Como parte de sus esfuerzos por incorporar nuevas tecnologías para la detección oportuna de cualquier falla, GTM está apostando por incorporar en su flota el sistema de telemetría de Cummnis, RoadAdvisor, el cual, de momento, se mantiene en fase de prueba.