Recientemente, Maersk en Norteamérica realizó un pedido récord de 110 camiones eléctricos VNR de Volvo Trucks para ser operados por su marca Performance Team; con la experiencia que les ha dejado este proyecto, la compañía comparte los aspectos clave que las flotas deben conocer para hacer esta transición hacia vehículos más limpios.

De acuerdo con la empresa, el primer requisito es el compromiso de las áreas gerenciales con el objetivo de descarbonización de emisiones y la inversión a largo plazo en su esfuerzo de varios años. 

Por ejemplo, comparte Maersk, ellos se comprometieron con las cero emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) para 2050, aunque esa fecha se aceleró 10 años hasta 2040 en todas las modalidades de trasporte y negocios como parte de un plan integral de gobernanza ambiental y social (ESG, por sus siglas en inglés). 

Por ello, en marzo de 2022, ordenó 436 camiones Clase 8 eléctricos para reemplazar los vehículos a diésel: “La descarbonización del transporte interior a través de camiones eléctricos de servicio pesado y la creación de infraestructura de estaciones de carga beneficia a las cadenas de suministro y las comunidades, y es fundamental para los planes ESG de transporte de Maersk”, explicó la compañía.

Sobre el tema, Carlo Bertani, Gerente Ambiental de América del Norte de Maersk, comentó que mediante el uso de este tipo de unidades, la empresa reducirá el ruido en las calles y las emisiones en las comunidades donde opera. 

Nuestro objetivo en el futuro cercano es que Maersk North America cargue toda su flota con electricidad 100 % renovable para ofrecer a nuestros clientes una alternativa ecológica para el transporte de corta distancia”.

Carlo Bertani, Gerente Ambiental de Maersk North America.

La segunda clave que considera Maersk para el despliegue de este tipo de tecnologías es la capacidad de escalar y buscar socios. 

En este sentido, la compañía se asoció con TEC Equipment, un concesionario de vehículos eléctricos certificado de Volvo Trucks, que ayudó a identificar las configuraciones de camiones ideales necesarias para operar las rutas de carga diarias. 

Esta sinergia les permitió aprovechar la herramienta Electric Performance Generator (EPG) de Volvo Trucks, que simula rutas del mundo real y determina cuáles son las más adecuadas en función de factores ambientales como los detalles de la ruta, los patrones de tránsito, la velocidad, la carga útil, el terreno y la temperatura ambiente. 

Esta solución llave en mano de Volvo Trucks –disponible en el mercado norteamericano–  se utiliza durante los primeros seis años de propiedad y brinda soporte las 24 horas, los siete días de la semana, mantenimiento programado y preventivo 

Por su parte, Michael Gallagher, Jefe de Abastecimiento Indirecto de Maersk North America, destacó que tanto Volvo Trucks como TEC Equipment sigue respaldando sus crecientes operaciones de flota eléctrica; un ejemplo es la capacitación continua que brindan para ayudar a sus conductores a optimizar el alcance del Volvo VNR Electric, incluido cómo aprovechar los beneficios de frenado regenerativo para agregar energía a la batería.

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¿Y los desafíos?

Maersk reconoció que uno de los retos de la operación de los vehículos eléctricos es la falta de infraestructura de carga. Para mitigar esto, la empresa está trabajando en cooperación con los servicios públicos y los funcionarios locales para garantizar tenerla en ubicaciones estratégicas para maximizar la eficiencia de sus operaciones. 

La compañía también trabajó con la unidad de movilidad de su socio de arrendamiento de almacenes, Prologis Mobility, para combinar la infraestructura de carga eléctrica con las instalaciones de almacén existentes para optimizar el despliegue de estos camiones.

Para Maersk, los vehículos eléctricos y el rendimiento de la batería aún se encuentran en los primeros años de adopción y no están exentos de desafíos, entre ellos, su costo.

Y es que una unidad con esta tecnología es de dos a tres veces más costoso que el de un vehículo diésel y, si bien el rendimiento de la batería evolucionará para mejorar en duración y reducción de peso, la realidad es que los primeros en adoptar la tecnología están trabajando para determinar el mejor camino a seguir. 

Por ejemplo, explicó esta empresa de logística global, la tecnología de batería actual tiene un promedio de 275 millas con una carga completa y una batería puede agregar más de 6,000 libras de peso extra a un camión. El tiempo de carga depende del estado de carga de la batería, la tasa de carga del dispensador y la capacidad del vehículo para aceptar una cierta tasa de carga. Los tiempos de carga iniciales son de aproximadamente 75 minutos, pero están mejorando con el tiempo.

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