En medio de la recuperación económica tras la crisis provocada por la pandemia del Covid-19 y con una alta demanda de servicios de autotransporte de importación y exportación, cada vez son más las empresas que están buscando la forma de ofrecer un servicio puerta a puerta internacional entre México, Estados Unidos y Canadá. 

Estos significa la habilitación de su paso entre fronteras, sin usar un transfer, de tal manera que tras la actualización del acuerdo comercial entre los tres países (T-MEC), este fenómeno podría seguir creciendo, siempre y cuando se respeten las reglas y acuerdos de cada nación. 

En este contexto, la Dirección Federal del Autotransporte Federal (DGAF) actualizó la lista de empresas de los tres países, autorizadas para cruzar sus fronteras y descargar sus fletes en su destino final. 

Desde el 16 de enero de 2015 el Departamento de Transporte de los Estados Unidos, a través de su Administración Federal para la Seguridad de los Autotransportistas (FMCSA), dispuso de la autorización operativa OP1-MX, para que los transportistas mexicanos que la solicitaran la obtuvieran, siempre y cuando cumplan con los requisitos para circular en ese país. 

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Esta autorización OP1-MX permite a los transportistas mexicanos transportar mercancías delante de las zonas fronterizas comerciales de Estados Unidos e ir a cualquier punto dentro de su territorio e, incluso, transitar a Canadá, en tanto no realicen operaciones domésticas.

Es decir, solo están autorizados a la prestación de servicios internacionales de autotransporte.

De forma equivalente, la Secretaría de Comunicaciones y Transportes otorga permisos a las empresas de Canadá y Estados Unidos que requieran prestar servicios internacionales de autotransporte México, siempre que cumplan con los requisitos establecidos por la DGAF establecidos para ese fin.

Al 9 de julio, 66 empresas mexicanas cuentan con autorizaciones de la FMCSA, mismas que tienen 883 vehículos registrados. 

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En tanto que dos empresas canadienses con 34 vehículos, así como 82 transportistas estadounidenses, con 1,019 vehículos, han obtenido permisos de la DGAF.

“Este tipo de autorizaciones facilitan las entregas de las mercancías de puerta a puerta, sin la obligación de transferir las cargas en la frontera de su país, a otros transportistas denominados transfer, que, a su vez, completan los envíos con un tercer transportista del otro país, cuando se trata de envíos desde las ciudades del interior que no están localizadas en la frontera”, detalló la DGAF.