De acuerdo con Quálitas, la siniestralidad ha alcanzado casi los mismos niveles previos a la pandemia, pues en 2021, se registraron más de 1.59 millones de incidentes de tránsito entre sus clientes.
Sergio Enrique Álvarez, Subdirector de Siniestros Metropolitana de Quálitas, detalló que durante 2019, se contabilizaron 1.65 millones de hechos, cifra que para el se colocó en 1.31 millones y, tras la reactivación económica, la tendencia volvió a su comportamiento regular.
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La aseguradora con mayor participación de mercado en el país, recordó que pronto se cumplirán dos años de que el mundo se detuvo casi por completo debido a la pandemia de COVID-19, que trajo fuertes impactos en la movilidad y economía global. Ya en 2021, con millones de personas inmunizadas, las actividades empezaron a volver a una relativa normalidad y los accidentes viales no son la excepción.
“En cuanto a la siniestralidad, registramos que en 2021 los meses más intensos fueron diciembre, octubre y noviembre. Para seguir realizando nuestras actividades cotidianas y reactivando la economía, pero sin que ello se traduzca en más accidentes, es primordial conocer los riesgos que hay detrás del volante y tomar en cuenta algunos consejos de conducta vial”; agregó el directivo.
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De acuerdo con el sitio web Conducta Vial Quálitas, los siete errores más comunes que derivan en hechos de tránsito son:
- Utilizar aparatos móviles
- Manejar bajo los efectos del alcohol
- Sobrepasar los límites de velocidad
- Presencia de lluvia y neblina en el camino
- No parar ante señales de tránsito o luz roja en semáforos
- Escuchar la radio o estéreo a muy alto volumen
- Rebasar de manera indebida
Ante este escenario, Sergio Enrique Álvarez sugirió considerar estas siete medidas cada que se esté al volante, las cuales ayudarán a llegar con bien en cada destino sin ocasionar daños:
- Manejar a la defensiva. Hacerlo de tal forma que se anticipe a las acciones equivocadas de los demás conductores.
- Utilizar siempre el cinturón de seguridad. De acuerdo con la Secretaría de Salud, reduce en un 50% el riesgo de muerte tras un accidente, así como la probabilidad de sufrir lesiones graves.
- Respetar los límites de velocidad. Que en las ciudades puede variar pero en carreteras federales es de 110 km/h durante el día y 90 km/h por la noche.
- Evitar manejar alterado o en condiciones extremas de estrés. Según un estudio de la industria, quienes conducen estresados tienen 28% más riesgo de accidentarse, además de que bajo los efectos del estrés se reduce la concentración en un 12 por ciento.
- Ceder el paso al peatón. De acido con la Pirámide de la Movilidad, se pone en primer lugar como prioridad para trasladarse a los peatones, en segundo a los ciclistas, en tercero al transporte público, después a las unidades de carga y por último a los automóviles y motocicletas.
- No revisar el celular mientras se maneja. Aunque sean unos segundos, dicha distracción puede convertirse en una fatalidad. Según la Asociación Mexicana de Instituciones de Seguros (AMIS), esta es la principal causa de siniestros vehiculares en el país desde 2015.
- Concentrarse siempre en el camino sin fijar demasiado la atención en el entorno. “Manejar es toda una responsabilidad y no una tarea cualquiera; una actividad tan riesgosa requiere una concentración a su medida, por lo que hay que tener siempre los ojos en el camino y los reflejos al 100 por ciento”
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Quálitas alerta que la siniestralidad vehicular en México está al alza y se espera que siga recuperando el nivel que tenía antes de la emergencia sanitaria. Mantenerla a raya sin que eso signifique menos autos, motos y camiones circulando, es responsabilidad de todos, empezando por quienes a diario usan el vehículo para cumplir con sus obligaciones.
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