Brasil se ha distinguido entre los países del continente por la creación e implementación de programas del transporte que reducen significativamente el número de percances en las carreteras, la clave en ellos es la correcta capacitación de los operadores

El riesgo de sufrir un accidente carretero siempre está latente. Sobre todo, porque el 90% de los siniestros que se registran en México se atribuyen al factor humano y el restante, a causas externas como la condición del camino o el clima, por mencionar algunas.

Esta situación, que no es exclusiva de nuestro país, ha motivado durante años a los especialistas en la materia a desarrollar programas y tecnologías para obtener datos y estadísticas así como a realizar un análisis de los percances en las empresas de transporte.

dataEn este sentido me parece relevante hablar de un sistema, que surgió a principios de los años 2000, y que logró reducir a cero el número de accidentes en Brasil, se trata del denominado Sharp Eye on the Road, el cual se ha implementado en diversas compañías transportistas, específicamente las dedicadas al traslado de materiales y residuos peligrosos de aquél país.

Inició en el año 2002 como una prueba piloto con los proveedores de transporte de DOW, considerada una de las compañías de la industria química más importantes del mundo. En una primera etapa, abarcó sólo a los transportistas de carga a granel y posteriormente a los de carga seca.

Dos años después, todos los proveedores de DOW ya operaban bajo este sistema, mismo que les permitió obtener ahorros por dos millones de dólares durante el 2005 debido a que no registraron accidentes graves.

Ese mismo año, los representantes de DOW decidieron que el sistema debía extenderse a otras empresas, por lo que Sharp Eye on the Road fue adoptado por los miembros de la Asociación Brasileña de la Industria Química (ABIQUIM Brasil).

Más de 7,500 operadores se han capacitado a través de este programa y la meta es llegar a 10,000.

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La importancia del programa

Screen Shot 2015-02-19 at 7.06.19 PMSharp Eye on the Road, Douglas es básicamente un programa para la mejora continua del transporte, el cual está basado en el comportamiento de los conductores.

El sistema contempla la conducta de los operadores porque los errores humanos son una de las cuatro principales causas de accidentes.

Las estadísticas revelan que el 90% de los accidentes ocurren por errores humanos, es decir, detrás de estos números hay un tema de comportamiento”.

La tecnología no lo es todo

Cuando una empresa del transporte decide implementar programas encaminados a disminuir el número de accidentes, los cuales representan un alto costo financiero, no sólo por las pérdidas económicas, sino por las repercusiones negativas en la imagen de la compañía; personas o familias afectadas, daños al equipo, la carga o el medio ambiente, debe considerar que la tecnología no lo es todo. Por más que se cuente con los mejores camiones, sistemas o carreteras, al final todo dependerá de la conducta del operador.

Por eso es importante la creación e implementación de programas como Sharp Eye on the Road, desarrollado para prevenir los comportamientos inseguros en el transporte y reducir a cero el número de incidentes.

Aunque pareciera una meta inalcanzable, los resultados de dicho sistema han demostrado lo contrario: Primero se trabaja en los percances menores, porque antes de que ocurra uno de consideración, es probable que hayan ocurrido varios pequeños.

A través de este programa se ha podido determinar que las causas de los accidentes –tanto menores como importantes– son las mismas, es decir, la conjunción de algunos factores determinan la magnitud del mismo.

Por medio de la información, análisis y estadística que genera Sharp Eye on the Road, las empresas pueden emprender acciones que conduzcan a reducir los accidentes.

Cabe destacar que los transportistas que desean implementar este tipo de programas, se deben involucrar de principio a fin y no dejarlo en manos de terceros, pues los directivos deben estar al pendiente de su desarrollo.

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Un caso de éxito que inspira

La empresa Canexus, dedicada a la producción de clorato de sodio y productos de cloro-álcali para las industrias del papel y tratamiento de aguas, cuenta con plantas en Canadá y en Brasil. Inspirada en el programa Sharp Eye on the Road, creó el suyo propio llamándolo Transportation Risk Management Program (TRMP). Fue ideado para evaluar a sus propias empresas de transporte y para reducir al mínimo los accidentes y sus potenciales daños a las personas y el medio ambiente. También abarca la capacitación y el trabajo conjunto con las comunidades locales, agencias ambientales, la policía y los bomberos para estar mejor preparados en caso de una contingencia.

El programa proporciona a los conductores manuales, evaluación de protocolos, indicadores mensuales de desempeño y el desarrollo de un evento anual de premiación a quienes obtengan los mejores resultados, lo que resulta un gran aliciente.

Los resultados de TRMP son dignos de mención. En dos años de implementación no se registraron accidentes de transporte de químicos. El programa recibió tal reconocimiento por parte del sector que fue presentado a otras asociaciones de transporte brasileñas así como al gobierno y a empresas e industrias diferentes a la química.

Este tipo de programas sin duda deben ser replicados en todos los países para reducir el número de percances relacionados con la industria del transporte. El mantenimiento de las mantenimiento a las unidades es fundamental, sí, pero más lo es la capacitación a los operadores quienes llevan en sus manos una gran responsabilidad con su empresa y con la sociedad.