La Ciudad de México (CDMX) se mantendrá en semáforo naranja al límite, con medidas más estrictas, debido al incremento en el número de hospitalizaciones en casos COVID-19.
Claudia Sheinbaum, jefa de Gobierno de la CDMX, informó que se ha registrado un crecimiento importante en los casos de COVID-19, por lo que se implementarán más medidas para frenar los contagios.
La funcionaria pidió a la población volver a quedarse en casa y salir solo si es necesario, en espacios abiertos, así como mantener el uso de cubrebocas, la sana distancia y el lavado frecuente de manos.
Informó que a partir del lunes se reducirá al mínimo la operación del gobierno en la ciudad, incluidos los organismos autónomos.
“Durante los últimos meses se fueron abriendo muchas oficinas del gobierno de la ciudad; es decir, los trabajadores del gobierno regresan a casa y las ventanillas al público se reducen al mínimo”, explicó.
Claudia Sheinbaum indicó que se está ampliando el código QR para todos los negocios y, para la siguiente semana, también será implementado en el transporte público, como en el metro, Trolebús, RTP y Metrobús, así como en el transporte concesionado.
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Además, se realizará una campaña rigurosa en el transporte para fomentar el uso de cubrebocas, guardar silencio
Como otra medida, pidió fortalecer el trabajo en casa en oficinas privadas, así como crear una campaña masiva para alertar a la población.
La jefa de gobierno volvió a pedir a las empresas que se cumpla con el 30% de aforo, así como mantener las protocolos de sanidad.
Como sexta medida, se reforzarán los filtros dosificadores en el Centro Histórico, la Central de Abasto, y tiendas comerciales y de autoservicio.
Asimismo, se incrementará el número de pruebas, en coordinación con el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) y el Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE), con el objetivo de llegar a las 20,000.
