La urbanización y demanda de transporte en la ciudad capital, así como el ofrecer servicios de transporte más eficientes por parte del gobierno mexicano, fueron factores primordiales que impulsaron la modernización no solo de los sistemas de transporte público en el país, sino también de la imagen urbana de las ciudades y de la calidad de vida de los habitantes.

En la República Mexicana, la prioridad a los buses con carriles propios, mejor conocidos como BRT (bus rapid transit, por sus siglas en inglés) comenzó a desarrollarse en el año 2003, cuando el sistema “Optibus” en León, Guanajuato, inició operaciones, tomando como base el esquema operativo de “Transmilenio” en Colombia; y para el año 2005, ya operaba la Línea 1 del Metrobús de la ciudad de México, dando inicio a una nueva era en la movilidad del país.

A partir de 2008, con la creación del Fondo Nacional de Infraestructura (FONADIN), el gobierno federal fortaleció el desarrollo de diversos esquemas de movilidad urbana sustentable, en especial en aquellas ciudades que superan los 500,000 habitantes.

Mediante este esquema, desde 2012, a través de BANOBRAS se han destinado 4,309 millones de pesos al desarrollo de diversos proyectos de transporte y la implementación de Sistemas Integrales de Transporte (SIT), en las principales ciudades del país, creándose 12 nuevos corredores BRT, equivalentes a la transformación de 279.3 kilómetros de vías carreteras en carriles confinados para BRT´s a nivel nacional.

Por su versatilidad, sustentabilidad y demás ventajas conocidas de los SIT y BRT, BANOBRAS, ha destinado más de 2,810 millones de pesos en la creación de los BRT´s de Mexicali Línea Express 1; Acapulco-Cd. Renacimiento; Tijuana; Puebla 2 Norte-Sur (dos BRT´s); Pachuca-Terminal Téllez; Indios Verdes-Ecatepec; León Optibus (3ª y 4ª etapa); y el ZM de la Laguna.

Rumbo a la movilidad del futuro.

Con proyección hacia 2018, el Banco Nacional de Obras y Servicios tiene en evaluación para su posible autorización, la inversión de 2,211 mdp aplicables a ocho proyectos adicionales, y los cuales ya reportan avances significativos respecto a su planeación e infraestructura, tales como:

  • BRT Oaxaca: SIT 1ª etapa, donde BANOBRAS destinaría 211.9mdp
  • BRT Aguascalientes: SIT por 261.8 mdp
  • BRT Zacatecas: por 382 mdp
  • BRT San Luis Potosí: por 129 mdp
  • BRT Durango: por 236 mdp
  • BRT Pachuca: 2ª etapa, por 400 mdp
  • BRT Monterrey Ecovías 2 y 3, por 448 mdp, y
  • BRT Ojo de Agua-Cabecera Tecámac (ampliación), cuyo apoyo federal superaría los 143 millones de pesos.

Asimismo, seis nuevos proyectos también son evaluados para implementarse en el mismo lapso, entre los que destacan los BRT de Cuernavaca y Puerto Vallarta, entre otros, cuya inversión ascendería a los 1,320 millones de pesos.

El concepto de “movilidad sustentable a largo plazo”, hace referencia no solo a la integración de diversos proyectos de transporte de manera funcional, sino a la inversión monetaria que requiere un Metrobus versus otros sistemas de transporte.

Si se considera que la construcción de un kilómetro del Sistema de Transporte Colectivo Metro cuesta 150 millones de pesos y el costo en BRT es de cerca de 10 mdp, ésta diferencia explica por qué muchas ciudades han adoptado esta modalidad de rutas troncales y carriles exclusivos, sobre todo cuando el precio que paga el usuario de ambos transportes es similar, y por tanto, el recaudo respecto a la inversión es mayor.