Luego del golpe que supuso el COVID-19, las empresas se plantearon cambiar su estrategia de negocio, ¿es una opción durante una crisis?

Carlos Ruiz, Profesor del Área de Política de Empresa del Instituto Panamericano de Alta Dirección de Empresa (IPADE), señala que esa, en cierta manera, es una pregunta de supervivencia y de adaptación a las nuevas condiciones.

“El inicio es no morirte. Hay que cuidar los gastos y mantenerlos al mínimo y cuidar los egresos. Hay que hacer un escenario catastrófico: qué pasa si las ventas caen un 70 por ciento, es diseñar una estrategia de sobrevivencia”, comparte en entrevista para TyT.

El segundo paso, explica el experto, es determinar qué hacer con la estrategia de negocio; para ello, dice, es necesario estudiar mercado y evaluar qué oportunidades hay. “Decidir qué voy a hacer, cuál va a ser mi estrategia para la nueva normalidad”, expresa.

Desde su perspectiva, el cambio de estrategia de negocio no es pasar de un servicio especializado a uno diversificado (o viceversa) solo porque sí. Se trata de cambios para sobrevivir, en primera instancia, y para atender las necesidades del mercado con las herramientas que la empresa ya tiene.

“Es un replanteamiento estratégico de dónde estás, cuáles son tus fuerzas, cuáles son tus capacidades y limitaciones, qué oportunidades hay, cuáles puedes aprovechar con tus habilidades, qué amenazas hay, qué tan fuertes son y diseñar una estrategia o un modelo de negocio para salir de la crisis en la nueva situación”, detalla Carlos Ruiz.

En el caso de las empresas de autotransporte especializada, ejemplifica, puede empezar evaluando con qué equipo especializado cuanta, ya sean camiones de gran capacidad, montacargas específicos, inclusos los procesos y habilidades de su personal.  Si alguno de éstos puede ser adaptado al mercado, hay una oportunidad de ofrecer nuevos servicios sin apartarse del negocio central.

La labor de un director consiste en diagnosticar, decidir y actuar en función de la información que tiene a la mano”.

Carlos Ruiz.

El entrevistado agrega que el empresario debe ponerse creativo y pensar qué puede hacer con las capacidades de manejo de carga, recursos, camiones, personal capacitado. “¿Qué puedo ofrecer? Es necesario un momento de reflexión estratégica para ver qué puedo hacer”, comenta.

Carlos Ruiz recalca que el empresario debe tener el cuenta que una estrategia de negocio tiene cuatro elementos: cuál es el cliente y sus necesidades, cuál es la propuesta de valor que se le hace, es decir, qué se le va a ofrecer términos de calidad, precio, servicio y hasta cantidad; cómo se va a entregar esa propuesta de valor y dónde está la utilidad para la compañía. “Si yo cuido estas cosas, si yo me enfoco muy bien en esas cuatro cosas ya sea especializándome o diversificándome, yo voy a tener una operación exitosa”, dice.

El experto concluye que si bien la crisis son un motor para reflexionar, hacer nuevos planteamientos de estrategia de negocio, y buscar posibilidades de innovación, las empresas no deberían hacer ese ejercicio en momentos críticos.

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