Luego de dar un importante paso en materia de electromovilidad en territorio nacional con la presentación de su chasis eléctrico eO500 U, Mercedes-Benz Autobuses comentó que su objetivo no es vender un autobús, sino ofrecer una solución de consultoría eléctrica.

Así lo comentó Sebastián Pesado, Coordinador de la Oficina del CEO en Mercedes-Benz Autobuses México, quien enfatizó que la electromovilidad, desde la perspectiva de la armadora alemana, no puede reducirse a un vehículo, pues implica una serie de factores que deben considerarse para que realmente resulte una opción viable para las empresas nacionales.

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El directivo explicó que el gran reto está en que la implementación de la electromovilidad sea de forma estructurada y ordenada, labor en la que el fabricante cuenta con toda la experiencia para asesorar a sus clientes hacia un proyecto rentable en el que puedan cubrir sus objetivos de productividad y sostenibilidad.

A lo largo de este proceso, lo primordial es conocer muy de cerca los requerimientos de los clientes y entender a detalle su operación; está información, dijo, es clave para determinar el paquete de baterías ideal, así como el tiempo y horarios de carga óptimos.

Entre los datos que resulta fundamental recabar, destaca el nivel de autonomía requerido, el aforo de las unidades, las horas valle para saber si hay oportunidad de realizar cargas intermedias durante las pausas en los trayectos, capacidad instalada en los patios e incluso, las necesidades de control de temperatura al interior de los autobuses.

Conocer esta información, detalló, es fundamental para diseñar un ecosistema eléctrico con base en los requerimientos de cada flota y destinar únicamente los recursos que sean necesarios para garantizar la viabilidad económica del proyecto.

Otro aspecto de gran relevancia, precisó, es contar con un software avanzado de gestión de cada una de las unidades y de la flota en general, lo que permite una administración eficiente y un seguimiento puntual para detectar cualquier punto perfectible que incremente aún más la productividad de las unidades.

El siguiente tema a considerar, precisó el representante de la firma de la estrella, es la infraestructura de carga para garantizar los procesos óptimos de carga en las horas más adecuadas con base en la operación de los vehículos.

No menos importante, dijo, resulta el soporte postventa, es decir, garantizar que exista un equipo especializado en la atención de los autobuses para resolver cualquier inconveniente mediante el herramental  y las instalaciones adecuadas.

La capacitación para la puesta en marcha de autobuses eléctricos es un elemento de gran relevancia para el éxito de este proyecto, por lo que Sebastián Pesado precisó que esta preparación no puede estar reservada únicamente para los las empresas de transporte y la Red de Concesionarios; explicó que debe hacerse extensiva a las autoridades y a la sociedad en general, pues la operación de estos autobuses tiene ciertas particularidades con respecto a los que operan con diesel. 

El directivo señaló que si bien la inversión inicial es alta, la electromovilidad resulta rentable a lo largo de la vida útil de las unidades, con un calculo de alrededor de 15 años, debido al ahorro en combustible y a la reducción en los mantenimientos con respecto a los vehículos a diesel.