El Presupuesto de Egresos de la Federación (PEF) 2020 dará certeza económica; sin embargo, hay que acompañarla con una política industrial con inclusión social, aseguró Francisco Cervantes Díaz, presidente de la Confederación de Cámaras Industriales (Concamin).
“La Confederación trabaja de cerca con todos los actores relevantes en el diseño de una Política Industrial, que apuntale de manera sostenida el crecimiento del país y la competitividad de la economía”, expuso Cervantes Díaz.
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La Concamin celebró la aprobación, en lo particular y en lo general, del PEF 2020 por parte del pleno de la Cámara de Diputados, con recursos por 6 billones 107 mil 732 millones 400 mil pesos.
Con 302 votos a favor y 65 en contra, los diputados avalaron el dictamen que consta de un monto de 6 billones 107 732 millones 400 mil pesos, desde el Centro Santa Fe, como sede alterna debido a los bloqueos instalados en San Lázaro desde el pasado 11 de noviembre.
“Es momento de redoblar esfuerzos, de trabajar por el desarrollo de todas las entidades que están trabajando en impulsar su desarrollo industrial para el bien de México; es momento de apoyar a las comunidades menos favorecidas”, expuso el Presidente de la Concamin.
Reiteró la importancia de establecer una política industrial de largo plazo, que privilegie la generación de empleos, el fortalecimiento de capacidades productivas, el fomento al mercado interno, pero sobre todo, el impulso al desarrollo regional para detonar el crecimiento económico.
El PEF 2020 fue votado con una reasignación de 11 mil 396 millones 600 mil pesos; incluye un incremento de 4.8% o de 8 mil 365 millones de pesos para la Secretaría del Bienestar, la encargada de los programas de pensiones para los adultos mayores y Sembrando Vida.
La Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) también recibió más recursos por parte de los diputados, se trata de 11.8% más o una ampliación de 2 mil 500 millones de pesos.
La política industrial con inclusión social de Concamin propone alcanzar niveles superiores de crecimiento y mejorar el bienestar de la población, fomentando la inversión productiva y a la generación de empleo formal, añadió.
“Sin lugar a duda es momento de reconstruir la arquitectura de política industrial para que México cierre el capítulo de “la mejor política industrial es la que no existe”, concluyó en un comunicado.
