En 1950, Genaro Tamez se fue a Estados Unidos y compró un camión. Luego de algunos trámites logró cruzarlo de regreso a Nuevo León y ahí mero subió sus naranjas. Ese era su negocio: comercializaba naranjas. 

Con ese primer camión iba y venía con su producto y con eso mantenía a su familia. El negocio prosperó durante años hasta que a finales de los sesenta ya tenía mucha competencia y la utilidad era cada vez menor. 

De pronto ya empezó a mover sus naranjas más allá del estado, sobre todo hacia Chihuahua. Ahí empezó  diversificar la operación y también movió papas. 

Más tarde, los menonitas de Chihuahua le vendían carne de cerdo de muy buena calidad. Cuando llegaban de regreso para Allende la colocaban muy rápido. Esto le permitió ampliar el espectro de su negocio y, también, entender mejor el transporte. 

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De tal manera que decidió comprar un camión Kenworth, modelo 1968, luego un Dina, otro Dina y después otro Kenworth. De pronto ya tenía más carga ajena que propia y decidirse no fue difícil. 

Ya para ese entonces sus tres hijos trabajaban con él y en 1973 oficializaron la creación de Auto Fletes Regionales.

En 1987 falleció uno de sus hijos y otro en 1998. Le quedó su hijo Heriberto Tamez, quien continuó el negocio hasta el año 2000, cuando decidió crear su propia empresa.

Igual que su padre, Heriberto inició su propio negocio ya con tres hijos, quienes más tarde se incorporaron a la empresa familiar. Y así fue como en 2014 cada uno decide tomar su propio camino, y uno de ellos, Carlos, funda Multitraslados Regionales. 

La especialidad de la compañía es el traslado de acero, pero también con el tiempo empezaron a diversificarse y ahora también tienen autotanques. 

Su hijo, Carlos Tamez Cárdenas, ahora es el director general de Multitraslados Regionales y siguen profesionalizando sus procesos, con una flota joven y con la misma visión de consolidarse en el sector. 

Tamez Flores recuerda que aprendió a manejar en un tractocamión Kenworth 1968. En aquella época lo vendieron y más año consiguió uno bastante parecido y lo compró.

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Así nació su afición por los tractos clásicos. Los arregla, los pone al 100 y los colecciona. Actualmente tiene seis de éstos. De hecho suelen ser exhibidos en Expo Proveedores del Transporte.

En la actualidad considera que entre la inseguridad y la sobrerregulación, el autotransporte es cada vez más afectado, sin embargo, sabe que la clave para seguir creciendo está en el servicio y en la profesionalización de la compañía, ahora dirigida por la cuarta generación de una empresa con tradición familiar muy arraigada en el sector.