Si bien el reparto de última milla es un segmento que ha mostrado un buen desempeño a raíz de la pandemia, Eduardo González, director general de En-trega, comentó que la inestabilidad en las cadenas de suministro globales también ha hecho mella en su operación, pues así como experimentan días récord en la demanda de servicio, también han tenido que hacer frente a otros de muy poca actividad.

Al respecto, explicó que prevé que esta inconsistencia se mantenga vigente a lo largo de este 2022, pues dijo, el problema radica en que sus clientes atraviesan periodos en los que venden mucho, pero esa misma demanda ocasiona que se queden sin materias primas y, al no contar con una cadena de suministro que opere con regularidad, se quedan sin producto.

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Esos altibajos, precisó, son los que se reflejan en la operación de la compañía, provocando que haya días en los que su capacidad instalada sea insuficiente para enfrentar la demanda récord de servicios y otros en los que queda sobrada ante la poca actividad.

Ante esta situación, el directivo está convencido de la importancia de pensar diferente y adaptarse a los retos que desde la llegada de la pandemia han tenido que sortear y aceptar como una condición que llegó para quedarse, pues los cambios se seguirán presentando cada vez de forma más acelerada, dijo.

Este reto, comentó Eduardo González, se suma a la inflación, a los retrasos en la entrega de unidades, escasez de operadores, incremento en el diesel e insumos y la necesidad de blindar su operación contra la inseguridad carretera.

La clave, detalló el directivo, está en apostar por las eficiencias para promover el ahorro y el mejor aprovechamiento de los recursos. Una parte muy importante de este principio es la optimización de sus rutas, de tal forma que se concrete la mayor cantidad de entregas, en la menor cantidad de kilómetros, lo que permite una reducción en consumo de combustible, llantas y otros insumos.

La seguridad de los operadores también es una prioridad para En-trega, de ahí la apuesta por la capacitación y la implementación de una serie de protocolos para evitar ser víctimas de la delincuencia y de cualquier accidente vial.

El directivo destacó la implementación de cámaras al interior de los vehículos para identificar malas prácticas en la conducción de los operadores y ofrecerles la retroalimentación de su conducción para corregir los aspectos que les permitan acceder a un manejo más seguro.

Eduardo González precisó que, al cierre de 2021, la compañía tapatía reportó un crecimiento a doble dígito con respecto al 2020 y, en línea con esta misma tendencia, siguiendo una visión conservadora a causa de los numerosos retos que seguirán presentes en este 2022, prevé un crecimiento semejante al término del año.

A la fecha, precisó, En-trega cuenta con un parque vehicular de 350 unidades tanto para el segmento de reparto urbano como el de larga distancia, pero más allá del número de camiones, el directivo reconoce que lo más importante está en promover la rentabilidad de la compañía.

Uno de los principales orgullos del director general de la empresa tapatía es la posibilidad de ofrecer 600 empleos dignos y bien remunerados, formando así un equipo comprometido con la calidad en el servicio.