La frase “matar dos pájaros de un tiro” aplica perfecto para explicar el motivo de la incorporación del complemento Carta Porte a las facturas de Traslado e Ingreso en el transporte de mercancías, ya que el Gobierno federal busca tener control sobre los bienes que son movidos de un punto a otro dentro del territorio nacional: va tras el contrabando, la importación ilegal y la procedencia ilícita de productos. El segundo “tiro” está dirigido a incrementar la formalización del servicio de autotransporte de carga.
Este nuevo requerimiento de CFDI con complemento Carta porte emitido por el Servicio de Administración Tributaria (SAT), a través de las reglas 2.7.1.8 y 2.7.1.9 de la Resolución Miscelánea Fiscal 2021 y sus distintas modificaciones, entró en vigor el pasado 1º de junio, pero será obligatorio a partir del 30 de septiembre.
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La autoridad otorgó a los contribuyentes 120 días para entender y adaptarse a la emisión y llenado de la información comprendida en distintos catálogos que indique a detalle el tipo, cantidades, rutas y destino de la mercancía trasladada en el país, así como la operación del autotransporte, transporte ferroviario, aéreo y marítimo.
La autoridad hacendaria determinó que los generadores de carga o comerciantes que requieren mover mercancía y tienen sus propios medios para hacerlo, emitirán un CFDI de tipo Traslado con su complemento Carta Porte, a fin de acreditar que tienen autorización para movilizar sus productos. Si quien realiza esta operación es un intermediario, agente aduanal o logístico, esta figura será quien expida este documento fiscal con su complemento.
En cambio, si el generador de carga acude a un proveedor de transporte para mover la mercancía, será este último quien emitirá un comprobante de tipo Ingreso con su complemento Carta Porte. Con esta acción, amparan la prestación de sus servicios e indican que están autorizados para hacer el traslado de productos que no son suyos.
En el caso específico del autotransporte, el SAT señala que, para acreditar el transporte de mercancías, la expedición del CFDI de tipo Ingreso con complemento Carta Porte se hará justo después de la contratación del servicio y antes de iniciar el viaje, cuando aún se desconoce el valor final del traslado, pues habrá que sumar maniobras, casetas, diesel y, en su caso, restar pérdidas. Aquí es donde nace una de las primeras inquietudes más recurrentes entre los prestadores del servicio de transporte de carga, la cual ya está sobre la mesa de la autoridad para su análisis.
Las reglas emitidas por el organismo recaudador dictan la emisión de un CFDI de Ingreso con su complemento por cada receptor (cliente), el cual incluirá datos acerca del tipo de transporte, año, placas, póliza de la unidad y nombre de la aseguradora, así como los datos del operador —quien asume una figura relevante en esta nueva disposición—.
Sin embargo, en la práctica, el autotransporte realiza viajes de largo recorrido en los que participan dos unidades pesadas diferentes o más de un operador. En caso de datos adicionales para los que no se cuenta con un espacio para ser especificados, o si están sujetos a una revisión y la información del CFDI no coincide con la operación, se estará cometiendo una falta.
La realidad supera a la autoridad
En México existen 520 distintas modalidades de transporte, con sus propia complejidad y necesidades, lo cual provoca que las instrucciones del SAT para cumplir con las facturas de Traslado e Ingreso —con su respectivo complemento Carta Porte en la ejecución—, impliquen serios problemas para las empresas prestadoras del servicio.
En este contexto, la Cámara Nacional del Autotransporte de Carga (Canacar) se acercó a la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) –una de las impulsoras del complemento Carta Porte– y a la autoridad hacendaria, para iniciar mesas de trabajo que deriven en mayor claridad y permitan el cumplimiento de las reglas de una forma más amigable.
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Magdalena Macías Ríos, miembro del Colegio de Contadores Públicos de México, confió en que el Gobierno federal escuche a los transportistas, “porque la realidad supera a lo que la autoridad está visualizando”. Asimismo, consideró que los 120 días con los que se cuenta para que los transportistas y generadores de carga se preparen para el cumplimiento de las nuevas disposiciones, también deben ser aprovechados por el sector público, con objeto de definir qué cosas se pueden hacer y cuáles son imposibles de ejecutar.
La especialista expuso que hay pasos o acciones inmediatas que los transportistas deben ejecutar en función de la obligatoriedad de la portación de un CFDI de Traslado o de Ingreso, con su complemento Carta Porte cada uno. Lo primero que deben hacer, recomendó, es acercarse a su proveedor de facturación electrónica para saber qué estrategia están implementando.
La otra acción es la creación de bases de datos con información de las unidades que conforman su flota, esto es: placas, número de permisos de la SCT, así como la información de sus operadores que incluya nombre completo, dirección y el Registro Federal de Contribuyentes (RFC) de cada colaborador.
Para el llenado del comprobante con complemento Carta Porte, el SAT creó distintos catálogos con claves que servirán para estandarizar la información, que consiste en carpetas que identificarán el tipo de transporte utilizado. Comprenden 26 claves de configuración Autotransporte Federal, 32 para el tipo de remolque, 28,695 para ingresar productos y servicios que se trasladan y 59 para especificar el tipo de embalaje, y, a fin de determinar los puntos de partida y destino de la carga, cuenta con más de 70,000 claves de colonias y 2,458 de municipios.
Gustavo Leal Cueva, director Ejecutivo de la Fiscalía, reconoció que los transportistas, los generadores de carga e intermediarios, están ante una situación compleja y cuentan con pocos días para resolverla, ya que no solo se trata de comprar un sistema de facturación, instalarlo o desarrollar el propio, que incluya los campos del complemento Carta Porte: “Es establecer una serie de nuevos procedimientos administrativos y de control que, hasta el momento, no existen para generar, compartir y procesar la información que se recibe”.
En el caso de los transportistas, añadió, tendrán que recibir una lista de la mercancía que van a trasladar para capturarla de forma manual, lo cual supondría una labor sujeta a error humano, a retrasos e ineficiencias, de modo que se debe desarrollar un mecanismo de automatización en el intercambio de información.
En tanto, el propietario de la carga debe acordar o idear la forma en que hará llegar al proveedor de transporte la información necesaria para que pueda capturarla en su sistema y hacer el complemento Carta Porte.
¿Qué cambia con el complemento Carta Porte?
El SAT y las empresas se encuentran contra reloj. Por un lado, los transportistas y generadores de carga han puesto sobre la mesa la necesidad de contar con adecuaciones que atiendan los requerimientos operativos de sus negocios, así como más tiempo para la correcta implementación de lo que la autoridad demanda.
En el otro extremo, la autoridad hacendaria vio en la portación de un CFDI de tipo Ingreso o Traslado, con complemento Carta Porte cada uno, ingresos estimados entre 10,000 y 20,000 millones de pesos para el último cuarto de 2021, para posteriormente ser 150,000 millones anuales.
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El tiempo apremia, y el asesor en temas fiscales, Gustavo Leal Cueva, sugiere a los contribuyentes preguntarse desde ya: ¿Cuál será mi fuente de datos? ¿Cómo los voy a recibir y cómo los procesaré? ¿Qué controles internos de calidad de información tendré para evitar errores, retrocesos e ineficiencias? A esta labor administrativa, se suma la generación de políticas con los clientes de los transportistas.
Es decir, las empresas dedicadas a brindar el servicio de autotransporte deberán definir la manera en que quieren recibir la información por parte de sus clientes, así como el tiempo previo necesario para generar los comprobantes con complemento Carta Porte. Hay que recordar que, en el caso de mercancías importadas, el transportista debe conocer los datos del pedimento.
Van a tener que institucionalizarse un poco más; sabemos que es un sector en donde hay muchos participantes que tal vez no tienen una administración muy robusta, pero tendrán que empezar a migrar hacia allá; de lo contrario, será un descontrol”.
Gustavo Leal Cueva, director Ejecutivo de la Fiscalía.
Además, los generadores de carga deberán hablar con sus transportistas a fin de definir cuál será la dinámica para ordenar el servicio, e incluso, cuál será el método de pago; porque es posible que se experimente una reconfiguración de la mecánica administrativa de los servicios prestados.
Pese a que el camino se observa complejo, el autotransporte federal encontrará en las acciones del SAT un mecanismo que empujará al mercado hacia una mayor formalización y a la generación de un ambiente más competitivo, donde los clientes tendrán que evaluar no solo las tarifas, sino un servicio adecuado.
