Mucho se habla de las nuevas tecnologías enfocadas a resguardar la integridad de los operadores; sin embargo, Alex Theissen, Presidente de la Asociación Nacional de Transporte Privado (ANTP), señaló con pesar el hecho que en la actual NOM-012 dichos aditamentos quedaron reservados únicamente para los fulles.

“No queremos quedarnos en las cavernas en cuanto a tecnología vehicular, y resoluciones como ésta, no favorecen la incursión de nuevos elementos de seguridad en las unidades”, precisó. Si bien es cierto que mientras mayor sea una unidad, también deben ser mayores los sistemas de seguridad con los que cuenta, estos no pueden ser exclusivos de ciertas configuraciones. En este sentido, la propuesta de la ANTP es que el uso de tecnologías como los frenos ABS, motores electrónicos, suspensión de aire y localización satelital, por mencionar algunos, se vuelvan un requisito en todos los vehículos sin importar su configuración.

Theissen detalló que para promover la adopción de estos sistemas, se ofrezcan incentivos directos a los transportistas que los incorporen en sus unidades, es decir, que tengan la posibilidad de transportar más carga, lo cual repercutirá de forma positiva en su rentabilidad.

Apuntó que para tener acceso a tecnologías más avanzadas, es necesario iniciar con las más elementales, pero si consideramos que ni siquiera esas son exigidas actualmente, estamos hablando de que en efecto, México se está quedando atrás en esa materia.

El representante de la ANTP, precisó que el argumento de las autoridades es que los sistemas de seguridad no están al alcance del hombre-camión; sin embargo, él está convencido de que para empezar a fomentar su uso, es necesario regularlo y brindarles ventajas aplicables a la carga. De acuerdo con sus palabras, la ecuación es fácil: “Si inviertes en seguridad, puedes llevar más carga”.