Las compañías VanDyne SuperTurbo y Allison Transmission anunciaron una alianza para dotar a un tractocamión Clase 8 que será de demostración, con el turbocargador impulsado mecánicamente de VanDyne y la transmisión TC10 de Allison.

El principal objetivo de la colaboración es demostrar cómo estos dos productos, combinados en un vehículo controlado inteligentemente, pueden reducir las emisiones de dióxido de carbono y mejorar la eficiencia en consumo de combustible sin sacrificar el rendimiento.

Con un diseño innovador, el TC10 completamente automático combina el convertidor de torque de Allison con un esquema de engranaje de eje intermedio gemelo único. Esta combinación ofrece cambios de potencia completa y ahorro de combustible de velocidad de crucero para aumentar la productividad y la eficiencia.

Por su parte, la transmisión es ideal para aplicaciones de tractor y está muy indicada para aplicaciones de distribución donde el tractor-remolque divide su ciclo de trabajo entre condiciones de ciudad y carretera.

Es importante señalar que el SuperTurbo actúa como un supercargador en etapas transitorias, utilizando una combinación de potencia de turbina y potencia de motor, a fin de permitir alzas en el torque del motor más rápidas y también minimizar la necesidad de tener más RPM del motor.

Estas capacidades se profundizan más con los beneficios que otorga el TC10 totalmente automático. Además, la nueva estrategia de control incorporará cambios predictivos con un motor más reactivo debido a la adición del SuperTurbo.

Liberar todo el potencial de la desaceleración del motor para maximizar la eficiencia del vehículo requiere un método con sistemas. Allison y VanDyne lanzaron la evaluación de este método de sistemas únicos para desacelerar el motor en el 2015, y este primer vehículo de demostración constituye la siguiente etapa del proceso.

Las potenciales aplicaciones que se están evaluando incluyen larga distancia, distancias regionales y condiciones de conducción en ciudad.