“La falta de incentivos fiscales inhibe la capacidad del sector transportista para evolucionar más rápido en un nuevo modelo de prestación de servicio y el cambio de hombre camión a sociedades mercantiles”, asegura Jesús Padilla Zenteno, presidente de la Asociación Mexicana de Transporte y Movilidad (AMTM) y director General de Corredor Insurgentes-Metrobús (CISA), quien además considera que el establecimiento de una tasa cero sobre el transporte formal urbano y suburbano sería un gran impulso a la inversión y favorable para el fisco.
Para el empresario transportista, la exención del IVA sobre el uso de transporte público generaría más beneficios que perjuicios al fisco, pues tal incentivo fiscal abonaría al proceso de formalización de los prestadores del servicio, cuya mayoría hoy se mantiene bajo la figura de hombre-camión, es decir irregulares e invisibles ante la Secretaría de Hacienda.
“Si tienes una base gravable del 5% al 6% y das una exención de esta naturaleza puedes aumentar la base gravable en un 30% o 40% contra lo que dejes de cobrar por IVA”, afirmó Padilla Zenteno y explicó que actualmente el tema del Impuesto al Valor Agregado al transporte es un gran lastre para quienes buscan mantenerse en la formalidad, puesto que no lo pueden deducir y al no deducirlo se convierte en una mayor carga fiscal.
En este sentido, asegura que a través de Coparmex, que preside Juan Pablo Castañón buscarán que el tema de la exención del IVA al transporte público urbano y suburbano se mantenga en negociación durante las discusiones de la Miscelánea Fiscal en el Senado.
De igual forma, el titular de la AMTM hizó extensivo el llamado al Gobierno de la Ciudad de México, para que una vez aprobada la Miscelánea Fiscal Federal “tracen en lo local algunos beneficios fiscales que puedan amortiguar el peso de los impuestos creados por la Federación para hacer más atractiva la llegada de inversores a la capital del país”.
El otorgar facilidades administrativas puedan ser ampliadas con alguna fórmula acordada entre el sector transporte y la Secretaría de Hacienda, puede agilizar el esfuerzo de inversión y modernización del parque vehicular en México.
En cuanto a la liberación del precio de combustibles incluida en el documento aprobado por la Cámara de Diputados, el representante del sector transporte confío en que será favorable siempre que realmente se permita que la competencia ocurra realmente contra los precios de América del Norte, “nuestros combustibles siguen siendo por mucho más caros y siendo el principal insumo afecta directamente la capacidad del transportista para prestar un servicio de calidad”, precisó.
Finalmente, recordó que los sistemas de transporte son las venas por donde circula la actividad económica de las ciudades y la falta de un transporte de calidad tiene repercusiones directas en la competitividad. “Al no contar con un transporte de calidad le estamos pegando al PIB y a otros temas como la improductividad, congestionamiento, emisiones contaminantes, temas de salud, siniestralidad y miles de millones de pesos perdidos”.
