Luego de laborar 18 años en asuntos gubernamentales, Fernando Lascurain Salazar, actual Director General de la Asociación de Distribuidores Daimler Vehículos Comerciales (ADAVEC), incursionó en la empresa K2, donde trabajó como jefe de auditorías con la pasión y compromiso que tanto sus colegas como colaboradores cercanos destacan de su personalidad.

Conforme a lo relatado por Lascurain en entrevista para TyT, él realizaba una auditoría en Guadalajara cuando recibió la llamada de uno de sus amigos más entrañables desde la infancia, Alberto López, quien solicitó su presencia justo en tierras tapatías para invitarlo a participar en la entonces denominada Asociación de Distribuidores Mercedes-Benz México.

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Aprovechando su estancia en Jalisco, no dudó en asistir a la cita para conocer los detalles de voz de Jaime Plasencia, quien, junto con Alberto López y Jorge Puga, encabezaba el Consejo Directivo del organismo.

La entrevista transcurrió muy bien, pero para asumir el puesto, era necesario enfrentar un filtro más en San Luis Potosí; no obstante, al contar con dos de los tres votos a su favor, Fernando Lascurain se convirtió en el candidato idóneo para ocupar la dirección general de la asociación.

Corría entonces el mes de octubre de 1991, y Fernando quedó en espera de que le confirmaran la fecha para iniciar esta nueva responsabilidad; sin embargo, pasaron varios meses sin recibir noticias, hasta que, en los primeros días de 1992, le avisaron que debía arrancar labores el 27 de enero.

Tras recibir una contraoferta de su jefe en K2, Lascurain decidió que la amistad con Alberto López pesaba más que cualquier incremento de sueldo, por lo que concluyó su relación laboral con la mueblería para arrancar en la ADAVEC en la fecha prevista.

Hace 30 años, recordó, la asociación contaba con solo siete colaboradores y representaba a los vehículos comerciales de la firma de la estrella, entre ellos, el emblemático Boxer y el FL 120 de Freightliner.

Más adelante, llegó uno de los momentos que el directivo considera clave en la historia de la ADAVEC: la creación del Comité de Autos que, hasta ese momento, agrupaba a cinco distribuidores.

Ya para el 2000, precisó, se llevó a cabo la separación de la parte de autos de la de vehículos comerciales, lo que para él representó el nacimiento de uno de los proyectos que vio crecer con su trabajo y dedicación.

Otro hecho de gran relevancia, detalló Fernando Lascurain, fue la creación de Grupo Asobens, organismo formado por cinco empresas enfocadas en incrementar la rentabilidad de los distribuidores que conforman la ADAVEC.

De acuerdo con el directivo, éste es uno de los grandes aciertos de la asociación, pues las cinco compañías del grupo han traído consigo varios beneficios para los miembros de la organización: mayor eficiencia en sus operaciones y más seguridad en el traslado de las unidades; acciones que en suma implican un reingreso para los distribuidores, pues según el testimonio de Lascurain, uno de sus objetivos es velar por incrementar el patrimonio de los afiliados.

El director general de la ADAVEC expresó que, en el transcurso de estos 30 años, ha enfrentado momentos complicados, entre los que recordó una demanda penal, o dos años en los que su actividad se vio limitada por las decisiones de algunos directivos.

No obstante, dijo, son más las cosas buenas que ha vivido, por lo que prefiere quedarse con lo positivo: “He sido muy afortunado; me gusta lo que hago, y cuando se cumple esa condición, siempre encuentras lo bueno por encima de las adversidades”, expresó.

Entre las principales lecciones que el directivo ha aprendido a lo largo de su trayectoria, destacó el hecho de buscar el cómo hacer que las cosas sucedan y defender la rentabilidad de los distribuidores.

Durante los últimos 10 años, relató, la asociación a su cargo ha gozado de gran estabilidad, condición percibida entre los 21 grupos y las 35 razones sociales que la conforman actualmente.

Al cobijo de la buena situación que atraviesa el organismo, Fernando Lascurain reconoce la importancia de las nuevas generaciones, de manera que actualmente trabaja en la preparación de quien habrá de tomar la estafeta de la dirección de la ADAVEC de cara al futuro.

El motor que inspira sus pasos

Lascurain destacó la relevancia que ha tenido su esposa en el éxito de su gestión al frente de la ADAVEC; de no haber sido por su apoyo, manifestó, estos 30 años de trayectoria no serían hoy una realidad.

“Si no hubiera tenido una compañera como la que tengo, difícilmente hubiera llegado hasta donde he llegado”, enfatizó.

Mencionó el papel fundamental de la familia, por lo que aconsejó a las nuevas generaciones privilegiar tres aspectos. Lo principal, dijo, es encontrar un trabajo que te apasione, entregarse en cuerpo y alma a esa labor, sin perder de vista que hay que velar por el bienestar personal y privilegiar en todo momento a la familia.