Es un escenario muy común: un operador en servicio se detiene a comer en cualquier carretera del país, cuando un grupo de delincuentes lo aborda y le dice: “Más adelante vamos a llevarnos tu mercancía; si no colaboras, de una vez aquí lo arreglamos”. Para el Lic. Alejandro Desfassiaux, Presidente de Grupo Multisistemas de Seguridad Industrial, en una situación así, el conductor atemorizado cede al robo pues no sabe en quién confiar, ya que en muchas ocasiones las propias policías locales están coludidas con el crimen organizado.

Por esta razón, considera que es necesario que las empresas de autotransporte establezcan protocolos de coordinación con compañías de seguridad privada y con autoridades, las cuales den auxilio y pronta respuesta al conductor en peligro.  

El punto de partida para afianzar esta tríada, es cuando el transportista recurre a la seguridad privada para desarrollar procesos desde el reclutamiento y selección de su personal, en los que se verifiquen los antecedentes de cada aspirante. También, crear métodos de rastreo satelital de sus unidades, que en determinados casos estén acompañados de vehículos con personal armado.

Un aspecto clave es contar con un C5 privado que establezca un monitoreo en tiempo real, con geocercas para alertar si los camiones se salen del recorrido asignado.

En este punto, destaca el Lic. Desfassiaux, Grupo Multisistemas de Seguridad Industrial sobresale por ser la única empresa en el mercado que cuenta con su propio C5 inteligente, además de un C4 en cada estado de la República. Este centro tiene un software de reconocimiento de rostros, seguimiento de rutas y velocidad de las unidades. Todos estos procesos son automatizados y no dependen de personal que esté viendo cámaras todo el tiempo.

Cuando se detecta una anomalía, entra el tercer elemento de este círculo virtuoso: la reacción de las autoridades.

El Lic. Desfassiaux comenta que la empresa de seguridad privada debe tener buena comunicación con los cuerpos de seguridad para detener el hecho y, si ya se ejecutó el robo, trabajar para recuperar la mercancía y evitar pérdidas al transportista.

Sin embargo, el experto es muy claro al decir que la coordinación con el Gobierno debe ser a nivel federal, porque la corrupción en las policías municipales y estatales complica los procesos, ya que están coludidas con el crimen organizado en el 98% de los casos.

Una inversión en seguridad privada reduce pérdidas, al menos en el primer año, de hasta un 50%”

Combatiendo al verdadero cáncer

“La creación de la Guardia Nacional es un punto de inflexión hacia un cambio que consideramos positivo, pues se trata de una corporación de formación militar que se basa en sus tres principios: patria, disciplina y honor”, comenta para TyT.

Sin embargo, el círculo no se puede completar mientras no tenga el control total de la seguridad a nivel nacional y dejen de operar las policías municipales y estatales que son, en su opinión, el verdadero cáncer.

Con más de 35 años de experiencia en el ramo, el Lic. Alejandro Desfassiaux argumenta que estos cuerpos policiacos no funcionan como instituciones, no hay ascensos por alto desempeño –como en el Ejército y la Marina–, no tienen éxito porque no hay carrera en sus mandos y regularmente son asignados por compromiso. “Necesitamos quitarle todo el peso político al sistema de seguridad nacional para que funcione como una institución confiable”.

En este sentido, hizo un llamado a la administración federal para que aproveche la mayoría que su partido tiene en las Cámaras de Senadores y Diputados –incluyendo los Congresos locales–, a fin de establecer que la Guardia Nacional opere en municipios y estados reportando a alcaldes y gobernadores: “Estamos en un momento crucial en el cual, si el presidente en turno quiere salir victorioso de sus promesas contra la inseguridad, tendrá que establecer este siguiente paso”.

Además, continúa, es necesario que esta corporación se consolide como un proyecto transexenal, pues cada presidente ha creado su propia organización, la cual a los seis años fracasa y no trasciende al siguiente mandato.

Agrega que la Guardia Nacional tiene una infraestructura perfecta, aunque requiere más recursos para registrar una mejora continua y mayor cobertura, pues hasta ahora la matemática no cuadra.

El Lic. Desfassiaux lo explica así: se pretende desplegar 70,000 guardias nacionales en todo el país, pero si en México hay aproximadamente 400,000 policías estatales y municipales, que son corruptos o están coludidos con el crimen organizado; más otros 500,000 delincuentes y 100,000 halcones, los elementos propuestos no lograrán combatir a este millón de criminales.

Otra propuesta del fundador de Grupo Multisistemas de Seguridad Industrial, es que la Guardia Nacional se encargue de las aduanas para disminuir la entrada de armas procedentes de Estados Unidos, de manera que establezca un protocolo de cierre total en el que se les exija a los norteamericanos los mismos requisitos estrictos que a los mexicanos para ingresar en su país.

Vieja historia, nuevos retos

El Lic. Alejandro Desfassiaux señala que, erróneamente, se dice que el robo al transporte es un tema nuevo o de años recientes; pero lo cierto es que viene desde la época de los “bandidos de Río Frío”, quienes a finales del siglo XIX hurtaban mercancías que pasaban entre Puebla y la Ciudad de México.

En entrevista para TyT, explica que la inseguridad en carreteras –y, en general, en todo el país– se convirtió en un problema grave desde hace 36 años y es un fenómeno que va en continuo incremento. De hecho, informa que entre 2018 y 2019, la incidencia de robo al transportista aumentó 49 por ciento.

Desde su perspectiva, siempre ha sido atractivo para los delincuentes este nicho, pues resulta muy sencillo vender la mercancía hurtada: “Anteriormente se robaban los camiones con productos de alto nivel de costo, hoy ya no; hoy se roban productos de interés básico porque es muy fácil comercializarlos a nivel estatal y municipal”, señala.

El incremento en la violencia con la que se cometen estos delitos, se ha convertido en otro de los problemas de la inseguridad. Y es que la mayoría de los grupos del crimen organizado opera por fracciones y, a veces, entre ellos, tienen conflictos territoriales, que han derivado en el recrudecimiento de hechos de sangre a nivel nacional. Aunado a ello, está la facilidad de conseguir armas en el mercado negro.

La creación y operación de la Guardia Nacional es una garantía de satisfacción para los ciudadanos, pero de nada sirve si no hacemos el protocolo completo».

Hoy, comparte el Lic. Alejandro Desfassiaux, este problema ya afecta al transportista con altos costos en las primas de seguros y hasta en la falta de crecimiento en sus operaciones: “Entonces, el primer reto que tienen es salir de ese bache, en el que no hay la misma inversión que había en años anteriores. El segundo, es hacer más efectivos sus procesos y costos de seguridad”, puntualiza.

Esto no se logrará si no apuestan por establecer el círculo virtuoso con autoridades y una empresa de seguridad seria, con experiencia en sus protocolos y que ofrezca soluciones a su medida. En Grupo Multisistemas de Seguridad Industrial, justamente se especializan en la excelencia en seguridad y en garantizar el retorno de inversión a sus clientes, para que ellos se dediquen a movilizar mercancías de manera eficiente y no concentren sus esfuerzos en el tema de los robos.

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