Ante un panorama nada halagador en el que la International Road Transport Union (IRU) prevé que en México se incrementará 175% la escasez de operadores de autotransporte de carga en este 2021, los directivos de las empresas del sector lo catalogan como el desafío más importante dentro de su operación.

Al respecto, Raúl Monroy, Director General de Transportes Monroy Schiavon (TMS), compartió que el déficit de conductores no es un problema al que se le vea solución a corto plazo, pues cada vez hay menor interés en este trabajo, mientras que la exportación de talento sigue en aumento y los esfuerzos para la formación de nuevas generaciones de conductores siguen siendo insuficientes para el nivel de demanda que existe.

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De igual forma, dijo, la inseguridad que acecha al autotransporte se ha convertido en un factor que desincentiva la continuidad de esta labor, pues ser operador representa una actividad de alto riesgo, aspecto que se suma a una vida solitaria, al hecho de pasar largas jornadas fuera de casa y la imposibilidad de atender los problemas familiares debido a su ausencia.

En tanto, Ilse Fernández, Directora Ejecutiva de Trancasa, comentó que la compañía a su cargo apuesta por impulsar aquellas acciones que posicionen al sector como una actividad atractiva para las nuevas generaciones, promoviendo la calidad de vida de los colaboradores y un balance ideal entre su vida laboral y familiar.

Para lograrlo, la compañía proporciona los tiempos adecuados de descanso, la preparación para que los operadores desempeñen su trabajo de mejor manera y, de forma especial, destacó el uso de la tecnología para proteger su seguridad y garantizar procesos más ágiles y eficientes a lo largo de cada una de sus actividades.

A la fecha, manifestó, la flota de la compañía incorpora una serie de sistemas enfocados en la mitigación de accidentes. Tal es el caso de cámaras que registran la actividad al interior de la cabina. Esta herramienta, dijo, permite corregir malos hábitos de manejo y, al mismo tiempo, esclarecer los incidentes en los que incurra alguna de sus unidades.

Con base en esta evidencia, al llegar a la terminal, uno de los instructores se acerca al operador para brindarle la retroalimentación necesaria, corregir esas malas prácticas y darle las recomendaciones que requiere para un manejo seguro.

Un recurso que hay que proteger

Raúl Monroy enfatizó la necesidad de cuidar a sus colaboradores, pues señaló que una empresa podrá tener el mejor camión, un inmejorable servicio de gestión de flota, la tecnología más avanzada, pero “si no tienes operadores profesionales, no tienes nada”, aseveró.

Destacó la relevancia de ofrecerles un trato justo, respetuoso y un entorno que reconozca la importancia de su labor. De ahí la necesidad de rodearse de clientes que contribuyan al cuidado de los operadores; que promuevan procesos de carga y descarga mucho más ágiles, que eviten encomendarles tareas que no les corresponden y que pongan en práctica una cultura de seguridad a favor de todos los involucrados en la cadena de suministro. 

No hay que perder de vista, comentó el director general de TMS, que al volante de cada camión hay una persona, por lo que lo principal es ayudarlos a desempeñar su labor de forma óptima.

“Lo relevante no es cuántos camiones tenga una empresa, sino cuántos operadores buenos tenga”, expresó Alex Theissen, Presidente de la Asociación Nacional de Transporte Privado (ANTP). En este sentido, agregó que lo principal es dejar en claro que el autotransporte es una industria de servicio, por lo que requiere gente bien capacitada, remunerada y lo más importante, reconocida por su labor.

Operadores con valor agregado

Noé Montes, Presidente del Consejo de Grupo TM, comentó que el déficit de operadores es un tema que siempre ha estado presente, pero se ha acentuado en los últimos años, ya que el reto no es solo reclutar conductores, sino conseguir que sean auténticos profesionales del volante.

El directivo declaró que Transmontes cuenta con un Instituto de Formación de Operadores, donde son capacitados para realizar un manejo seguro, eficiente y responsable. No obstante, añadió que a través de la iniciativa Técnicos Digitales en Conducción, la compañía opta por acercar a los aspirantes a la tecnología, principio básico para el desempeño de esta labor en la actualidad.

De igual modo, manifestó que la formación de operadores no solo es tarea de los transportistas, sino una responsabilidad compartida entre empresas, armadoras, cámaras y asociaciones e incluso distribuidores, pues la falta de conductores puede repercutir también en una menor compra de unidades y menor demanda de refacciones.

Es asunto de todos los involucrados hacer del autotransporte un sector atractivo para las nuevas generaciones, y lograr que los jóvenes quieran manejar un camión.

“Hay que tomar muy en serio este tema, y formar gente apasionada por sumarse a esta labor”, enfatizó el empresario.

Mujeres al volante

Ilse Fernández hizo referencia a su semillero de operadores, conformado por su escuela en México y, recientemente, también en Estados Unidos. Esta estrategia, dijo, les permite formar a los conductores desde cero y, a lo largo de ese proceso, inculcarles los valores de la compañía, el enfoque en la calidad de su servicio y, por supuesto, el uso adecuado de la tecnología como aliada para realizar su labor de forma óptima.

Al graduarse, los conductores pueden sumarse a las filas de Trancasa, donde encontrarán un interés genuino en sus necesidades, trato digno, remuneración justa, crecimiento profesional y reconocimiento de su labor.

Por otro lado, consciente de la relevancia de la diversidad en los equipos de trabajo, Ilse Fernández expresó que la compañía se inclina por la incorporación de mujeres a la operación de las unidades. A la fecha, precisó, cuenta con cerca de 20 conductoras tanto en México como en Estados Unidos.

La inclusión de mujeres, jóvenes recién egresados y profesionistas con gran experiencia, ha permitido la conformación de equipos diversos que se enriquecen con las aportaciones de cada uno.

En este sentido, Alex Theissen coincidió en que un aspecto de gran relevancia para contrarrestar el déficit, es hacer extensivo el reclutamiento a las mujeres, de lo contrario, esta actividad estaría restringida a la mitad de la población.

Al respecto, mencionó que un punto clave para incrementar la participación femenina en este sector, es promover condiciones idóneas para el descanso de las operadoras a lo largo de sus viajes por el territorio nacional.

Asimismo, Theissen Long precisó que es necesario incrementar el número de instituciones y centros de entrenamiento, pues tal vez hay personas que muestran interés por la operación de vehículos pesados, pero requieren un lugar donde puedan capacitarse. Para lograr este objetivo, dijo, es necesario que todos los involucrados en la industria sigan sumando esfuerzos.

Un aliado en el gremio

Ramón Medrano, actual Presidente de la Cámara Nacional del Autotransporte de Carga (CANACAR), hizo patente su interés por impulsar la dignificación de la labor de los operadores y dar continuidad a la profesionalización del sector durante su gestión.

“Los operadores son la razón de ser del autotransporte. Sin ellos, nada es posible, de tal manera que durante mi administración tendremos que reivindicar su papel esencial en la cadena de suministro”, detalló Medrano Ibarra.

Para llevar a la práctica este objetivo, el líder del organismo pondrá en marcha cinco acciones: disminuir la rotación de operadores, incrementar la seguridad en carretera, reducir la edad del parque vehicular, apostar por la formalidad de las empresas de autotransporte y promover las claves para una operación cada vez más eficiente y rentable.