El Gobierno federal anunció la eliminación de la caseta de Fortín, una sentida demanda de más de 30 años de empresarios y la ciudadanía de Veracruz, por sus implicaciones en los tiempos de traslado de carga y de personas en la región.
Durante la toma de protesta de Miguel Ángel Martínez Millán como presidente de la Cámara Nacional del Autotransporte de Carga (Canacar), Jorge Nuño Lara, secretario de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes, informó que se cerrará la caseta de Fortín, como una estrategia a favor del movimiento de carga en México.
Hay proyectos estratégicos que tiene un impacto en el autotransporte, en lo particular me refiero a la reubicación de ciertas plazas de cobro que tradicionalmente tienen un amplio aforo y con ello representan cuellos de botella, en este caso, la plaza de cobro de Fortín”.
Jorge Nuño, titular de la SICT.
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El líder de la SICT detalló que se eliminarán los cobros de los movimientos troncales en las autopistas Acatzingo- Ciudad Mendoza, Ciudad Mendoza-Córdoba y Córdoba- Veracruz.
Además, de que se ampliará el número de taquillas, se modernizará el edificio administrativo y el sistema de cobro de las plazas La Esperanza y Cuitláhuac. «De tal forma que el Fortín ya no será un cuello de botella”, dijo.
Más tarde, el gobernador de Veracruz, Cuitláhuac García, agradeció al Gobierno federal que haya escuchado la solicitud de quitar la caseta de Fortín y añadió que, a más tardar un mes, habrá detalles del proyecto.
El impacto de la caseta de Fortín en el autotransporte
La noticia fue recibida con agrado por parte de transportistas y generadores de carga, en especial por quienes tienen su centro de operaciones en la región de las altas montañas, así como por quienes operan en el corredor formado por Veracruz, Puebla y la Ciudad de México.
Othón Porres, Presidente de Grupo Porres, expuso en entrevista para TyT que la caseta de Fortín es “un bloque que obstruye toda posibilidad de eficiencia en el transporte”, por esa razón su eliminación tendrá un importante beneficio para la logística.
Hemos estimado que, en los últimos 3 años, se requiere 20% más de unidades pesadas para atender la misma demanda. Es decir, si eran 100 tractos los que se requería, hoy para la misma carga se requieren 121, para enfrentar los tiempos que se pierden en la caseta de Fortín, principalmente”.
Othón Porres, Presidente de Grupo Porres.
Se agiliza la ruta para el sureste mexicano
El empresario de la región expuso para TyT que la noticia no puede ser mejor para la comunicación México-Puebla-Veracruz y para todos los pueblos y ciudades de las altas montañas.
Entrevistado por separado, Edgar Chahín, presidente de Fletes Hesa, sostuvo que la caseta de Fortín, con el tiempo, se convirtió en un obstáculo para el desarrollo social y la movilidad de las personas, así como para el crecimiento económico de la zona.
Hay un sentido de satisfacción entre los empresarios, porque sabemos que tendrá un impacto muy importante en la sociedad y se logrará un mayor desarrollo en la zona, más allá del crecimiento de Orizaba.
El área conurbada de Córdoba y Orizaba es de casi un millón de habitantes, pensamos que esto (eliminar la caseta de Fortín) va a significar algo muy importante, además, estamos en la ruta para el sureste mexicano”.
Edgar Chahin, presidente de Fletes Hesa.
El transportista ubicado en Orizaba reconoce que ese nudo logístico provocado por la caseta de Fortín también tiene un efecto negativo en el comercio establecido en esa ciudad y en Córdoba.
Lo anterior debido a que el tiempo de recorrido de Orizaba al punto de Fortín, sin la caseta, es 10 minutos como máximo y para cruzar la plaza de cobro se requiere de 30 minutos, cuando la demanda era baja, a una hora. Aspecto que inhibe la movilidad de las personas en la región.
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